Las mascarillas no serán obligatorias en espacios cerrados a partir del 20 de abril, aunque se sigue recomendando su uso en espacios públicos cerrados y en los que no se respeta la distancia. Durante la pandemia les hablamos del que se llegó a denominar el “síndrome de la cara vacía” por aquellas personas que tenían miedo al contagio y quitarse la mascarilla les provocaba ansiedad.
Ahora se suman muchos adolescentes que, aun pudiendo quitarse la mascarilla en el patio de recreo no lo hacen, muchos por vergüenza. Desde el Colegio Profesional de Psicólogos de Aragón, con la psicóloga Rosana Bellosta, cuenta cómo es una edad en la que los adolescentes tienen muchas inseguridades y tras las mascarillas se sentían seguros.
El uso de las mascarillas llegó hace dos años en los que se ha vivido una evolución de uso en la que ha habido una adaptación. Es el mismo proceso que ahora ha de seguirse a la ahora de quitarse la mascarilla. De momento, se seguirá llevando en lugares cerrados como transporte público, residencias o espacios sanitarios.
