Mañana se celebra la 39ª edición de los Premios Goya, la gran fiesta del cine español que se da cita, por primera vez, en Granada, en el Palacio de Exposiciones y Congresos. En poco más 24 horas se reunirán allí nominados, allegados, autoridades y grandes estrellas de nuestro cine. Fernando Ramallo era una de las grandes promesas de nuestro cine. Fue nominado al Goya a Mejor Actor Revelación 1998 por su interpretación en 'Carreteras Secundarias', pero no lo ganó. “A mi me dijeron que lo mejor que me podía pasar es que no me lo dieran porque tenerlo no quiere decir que tienes trabajo, algunas veces es contraproducente”, ha indicado Ramallo. No tenía ni 18 años y ya había sido nominado al Goya y había protagonizado dos películas. Podría decirse que su carrera iba viento en popa y, aunque protagonizó alguna película más en los años siguientes.
Se me asoció mucho con papeles de adolescentes
Según el último Estudio sociolaboral de la Fundación AISGE, solo el 7% de los intérpretes españoles puede vivir de su profesión y el 77% no ingresa más de 12.000 euros al año: “Yo ahora cuando hablo con actores intento no desanimar mucho, pero hay que prepararse para lo que venga”, ha explicado Ramallo. Él terminó convirtiéndose en uno de esos actores que no pertenecen al 7% de privilegiados que pueden vivir de su profesión.
Cuando las llamadas no llegan, Ramallo ha reconocido que "te culpas a ti mismo, piensas que has hecho algo mal, te culpabilizas de todo. En tu vida conoces a actores que tienen casas rurales como plan B y son muy felices".
Hay mucho tabú entre nosotros
A día de hoy el actor ha reconocido que: "tengo rencor, tengo que luchar mucho contra ello. Rencor contra este mundillo que es un poco cruel, las condiciones laborales no son del todo buena, hay abusos de poder. A mi personalmente me han tratado de maravilla, pero no todo el mundo ha tenido esa suerte".