100 días han pasado desde que comenzara la guerra de Ucrania. Una invasión más lenta de lo que Moscú diseñó, que ha logrado revitalizar la OTAN, unir a la Unión Europea y provocar una crisis económica a través de la energía que alcanza incluso a los alimentos.
La gestión de estos peligros condiciona el apoyo de los ciudadanos a sus gobiernos. En España, las encuestas dicen que es un respaldo menguante por razones económicas pero también políticas. Y se refleja con particular fuerza en Andalucía cuya campaña comienza hoy. Si los que durante más de 30 años han sido muy fieles votos socialistas confirman su viraje a la derecha no sólo estarían bendiciendo las políticas de Moreno Bonilla. Estarían lanzando un claro mensaje en clave de política nacional.
