La juez Alaya lo debe tener muy claro. Le impone una fianza de casi 30 millones de euros o si lo prefieren, de 5.000 millones de las antiguas pesetas, por responsabilidad civil, a la ex ministra de Fomento Magdalena Alvarez. La considera uno de los cerebros del sistema de subvenciones ilegales organizado en Andalucía. Antes partía que doblá, dijo Alvarez en su día. Alaya empieza a encorvarla.