Los precios de la vivienda suben con fuerza y nos recuerda a 2007, pero la causa ahora es muy diferente. Hasta 2007 se construían cada año 200.000 viviendas más que los hogares que se creaban, ahora se crean unos 100.000 hogares más de las viviendas que se finalizan.
En 2007 la deuda hipotecaria de las familias era del 80% del PIB, ahora ha bajado a la mitad y los bancos financian esas hipotecas con depósitos a tipos bajos gracias a estar en el euro, y por eso también pueden dar las hipotecas a tipos bajos.
Según el Banco de España se necesitan 600.000 viviendas más de las que se construyen, especialmente vivienda de protección oficial a precios asequibles para jóvenes, tanto para comprar como para alquilar. Y el problema es el exceso de regulación y la burocracia, especialmente en el desarrollo de suelo.