Última semana de mes. El próximo domingo ya será junio. En veintiséis días estará empezando el verano (no confundir con las vacaciones, que salvo para los escolares, no es lo mismo).
Ciento sesenta y ocho semanas cumple ya la invasión rusa de Ucrania. Ochenta y dos cumple la invasión israelí de Gaza. Nadie esperaba lo contrario, pero la semana comienza con la evidencia de que ni Putin ni Netanyahu aflojan. Es decir, que en nada les afecta la sucesión de llamamientos, presiones, iniciativas de organizaciones internacionales y numerosos gobiernos para que ambos echen el freno y acepten, en el peor de los casos, dejar de matar ucranianos y gazatíes durante un tiempo: o sea, un alto el fuego —porque de poner fin a sus invasiones, ni hablamos—.
Nadie esperaba lo contrario, pero la semana comienza con la evidencia de que ni Putin ni Netanyahu aflojan
La Casa Blanca desmintió el jueves que Trump hubiera confesado a dirigentes europeos que es consciente de que Putin no tiene el menor interés en detener la invasión porque cree que está ganando, tres años después de violar la soberanía de Ucrania y provocar un estremecedor éxodo de refugiados. Trump se matizó a sí mismo y regresó al estribillo de que la negociación avanza y su amigo Vladimiro acabará sentándose a firmar no ya un alto el fuego, sino el armisticio, pero mientras eso no pasa, lo que sí demostró ayer el ruso fue su capacidad para ordenar una nueva tanda de bombardeos que, a decir del gobierno ucraniano, es la mayor, en un día, de las últimas ciento sesenta y ocho semanas. Y el propio Trump dice ahora (esta madrugada) que Putin sigue matando gente y que no entiende qué le pasa. Le pasa que es Putin, tampoco hay que darle muchas más vueltas.
Y el propio Trump dice ahora (esta madrugada) que Putin sigue matando gente y que no entiende qué le pasa. Le pasa que es Putin, tampoco hay que darle muchas más vueltas
Respecto de Netanyahu, sin novedad, también. A él tampoco le afectan ni las críticas internas, ni las movilizaciones populares, ni la coincidencia —cada vez mayor— de gobiernos de ideologías bien distintas que entienden que la opresión sobre la población de Gaza es insoportable. Ochenta y dos semanas después de los atentados de Hamás, Israel comprueba cómo tanto gobiernos amigos como gobiernos críticos reprueban la operación militar y el bloqueo de la ayuda humanitaria. Ha difundido la prensa israelí los cálculos que maneja el Ejército: en dos meses pretende completar la ocupación del 75% del territorio de la franja; dos millones de personas serán evacuadas de sus hogares para ser internadas en campos de refugiados.
Ha difundido la prensa israelí los cálculos que maneja el Ejército: en dos meses pretende completar la ocupación del 75% del territorio de la franja; dos millones de personas serán evacuadas de sus hogares para ser internadas en campos de refugiados
Un año y medio después de que Netanyahu prometiera una victoria rápida que erradicara para siempre a Hamás, su propio Ejército calcula que la organización terrorista tiene hoy cuarenta mil efectivos, es decir, los mismos que tenía antes del siete de octubre de 2024. Si hasta marzo, los mandos militares israelíes se felicitaban de que Hamás ya sólo dispusiera de brigadas aisladas, el nuevo jefe del Estado Mayor sostiene que sigue funcionando como una fuerza jerárquiza y organizada. Y con cientos de cohetes que aún no han sido utilizados. Y este otro dato que maneja el propio Ejército israelí: por cada militante de Hamás muerto en estos dieciocho meses, han muerto tres civiles que nada tenían que ver. Por cada terrorista eliminado, tres personas comunes y corrientes eliminadas, también.
Y este otro dato que maneja el propio Ejército israelí: por cada militante de Hamás muerto en estos dieciocho meses, han muerto tres civiles que nada tenían que ver. Por cada terrorista eliminado, tres personas comunes y corrientes eliminadas, también
El gobierno de España, uno de los más beligerantes de la Unión Europea contra la ocupación israelí, reunió ayer en Madrid a ministros de veinte países, la mayoría árabes, para reclamar el embargo total de armas —en precisa sintonía con el movimiento que la semana pasada hizo el grupo socialista sumándose a una iniciativa que los ministerios de Economía y Defensa veían, curiosamente, difícil de aplicar—. Lo relevante de esta reunión de ayer, que está lejos de ser una Conferencia Internacional de paz como aquella de Felipe en el 91, es que hace un año España sólo contaba con el aliento de Irlanda y Eslovenia, dentro de la UE, pero ahora también atrae a Alemania y Francia. Bien es verdad que de la reunión de ayer no ha salido siquiera una declaración común de los gobiernos presentes.
Bien es verdad que de la reunión de ayer no ha salido siquiera una declaración común de los gobiernos presentes
Esto va más allá de lo que la semana pasada pactaron los ministros de Exteriores europeos. Se acordó revisar el tratado de asociación con Israel. El gobierno de España no habla ya de revisar sino de suspenderlo. Yendo un paso por delante en el convencimiento de que la mayoría de los gobiernos acabarán reclamándolo también en caso de que Netanyahu no frene. Y ya se ha visto que no está por la labor de frenar.
Esto va más allá de lo que la semana pasada pactaron los ministros de Exteriores europeos. Se acordó revisar el tratado de asociación con Israel. El gobierno de España no habla ya de revisar sino de suspenderlo
¿Saldrá el informe de la UCO sobre Santos Cerdán?
Empezamos semana con la misma pregunta que martillea las cabezas de unos cuantos altos cargos de nuestro país desde hace tiempo. ¿Será hoy, será mañana, será esta semana? ¿Será esta semana cuando, por primera vez en la historia, un fiscal general del Estado sea procesado como presunto autor de un delito? Podría ser, sí, podría ser que sea ésta. ¿Será esta semana cuando la UCO entregue, por fin, su informe sobre Aldama-Cerdán al juez del caso Ábalos?
¿Será esta semana cuando la UCO entregue, por fin, su informe sobre Aldama-Cerdán al juez del caso Ábalos?
Podría ser, sí, podría ser que sea ésta, en una especie de tormenta perfecta que sacuda al partido que puso la mano en el fuego por su secretario de organización y al gobierno que habla del fiscal general como si fuera suyo. ¿Será esta semana cuando la opinión pública conozca el informe de la UCO, porque se filtre, naturalmente, y el gobierno se rasgue las vestiduras reclamando otra investigación y amagando con denunciarlo él mismo?
¿Será esta semana cuando la opinión pública conozca el informe de la UCO, porque se filtre, naturalmente, y el gobierno se rasgue las vestiduras reclamando otra investigación y amagando con denunciarlo él mismo?
Sí, sobre lo que dijo el gobierno sobre la filtración de los guasaps de Ábalos y Sánchez... Han pasado trece días y nada se sabe de las acciones legales que fueron anunciadas. Para ser tan grave la violación de la privacidad del presidente, ¡delito!, dijo él mismo en el Congreso no se ha presentado aún denuncia alguna. El presidente es víctima de un delito y lo deja pasar, qué cosa tan rara. En fin, ¿será esta semana cuando por fin presente su denuncia? A saber, porque de esto el gobierno no ha vuelto a decir una palabra.
Ahora les contaremos lo último sobre la UCO que publica a esta hora El Confidencial.
Para ser tan grave la violación de la privacidad del presidente, ¡delito!, dijo él mismo en el Congreso no se ha presentado aún denuncia alguna. El presidente es víctima de un delito y lo deja pasar, qué cosa tan rara
Las maniobras de una emisaria del PSOE para recabar material, o munición, contra el teniente coronel que dirige las investigaciones de la UCO que tanto disgustan a los socialistas. Se reunió con uno de los empresarios cuyo juicio por fraude comienza hoy en la Audiencia Nacional para animarle a facilitar información sobre alguna irregularidad que poder imputarle al teniente coronel a cambio de ayuda en su causa judicial. ‘Como víctima que tú has sido’, le dijo, ‘de la camorra de la guardia civil’.
Las maniobras de una emisaria del PSOE para recabar material, o munición, contra el teniente coronel que dirige las investigaciones de la UCO que tanto disgustan a los socialistas
Un país desencantado con el gobierno
En fin, las encuestas que se vienen publicando son tozudas y retratan un país desencantado con el gobierno de coalición, más con Sumar que con el PSOE. Una nueva de investidura de Sánchez, con estos números, sería imposible. Ni reclutando de nuevo a Puigdemont, Junqueras y Otegi —los incombustibles— tendría mayoría suficiente. La Vanguardia, ayer, y El Español, hoy, reflejan el hundimiento de Sumar (o de Sumar y Podemos, con dos escaños tampoco están para tirar cohetes los anti yolandistas) y el auge de un PP que roza los 150 diputados y no a costa de Vox, precisamente. Sólo Tezanos mantiene por delante —muy por delante— a su propio partido y el de quien lo ha sentado en la poltrona en la que, pese al descrédito general, permanece.
Sólo Tezanos mantiene por delante —muy por delante— a su propio partido y el de quien lo ha sentado en la poltrona en la que, pese al descrédito general, permanece
En Madrid, dos años después de las últimas autonómicas, la mayoría absoluta de Ayuso no sólo no se resiente sino que se afianza. Hoy la esperanza de dos ministros, Oscar López y Mónica García, rivales en el liderazgo de la oposición a Ayuso —con toda la potencia de fuego de sus dos ministerios—, su esperanza es que el caso del novio termine en condena, que el caso del fiscal general termine en absolución y que el caso de las residencias, recién reabierto, concluya en una sanción penal a altos cargos del gobierno autonómico que permita a los dos ministros seguir imputando a Ayuso la muerte de los ancianos pero con una sentencia judicial que los respalde.
Su esperanza es que el caso del novio termine en condena, que el caso del fiscal general termine en absolución y que el caso de las residencias, recién reabierto, concluya en una sanción penal a altos cargos del gobierno autonómico
Hoy declaran en el juzgado como imputados los dos directores generales de coordinación sanitaria que tuvo el gobierno madrileño en 2020. ¿Presunto delito? Negar asistencia médica a cientos de personas en un acto de discriminación injustificada. O traducido, abandonar a personas mayores en las residencias en los peores días de la pandemia. Son los primeros cargos públicos investigados y aún es pronto para saber si serán los últimos.
O traducido, abandonar a personas mayores en las residencias en los peores días de la pandemia. Son los primeros cargos públicos investigados y aún es pronto para saber si serán los últimos
En realidad, la oposición en Madrid lleva años imputando a Ayuso la muerte de los ancianos sin necesidad no ya de sentencia sino de juicio. Es sabido que, en España, no hay oposición a la que le parezca necesario aguardar a que haya sentencias condenatorias para dar por probados los delitos de quien gobierna.
- Lo vemos en el caso del hermano de Ayuso —recurrente en las prédicas de Sánchez y su ministro para la transición madrileña—.
- Lo vemos en el caso de las residencias —recurrente en el discurso de la ministra de Sanidad—.
- Lo vemos en el caso Ábalos —donde hace meses que Feijoo dio por cómplice y culpable al presidente del gobierno y a varios de sus ministros—.
- Lo vemos en el caso Begoña —a la que el PP sentó en el banquillo aunque sólo esté, de momento, investigada—
- Y lo vemos en el caso del Sánchez músico —procesado, pero que podría quedar absuelto—.
Es sabido que, en España, no hay oposición a la que le parezca necesario aguardar a que haya sentencias condenatorias para dar por probados los delitos de quien gobierna
Lo vemos, en realidad, en cualquier otro caso que afecte o a dirigentes políticos o a sus alrededores. Condenas preventivas, una especialidad de nuestra clase política.
