OPINIÓN

Monólogo de Alsina: "Concordia unilateral"

Carlos Alsina reflexiona en su monólogo de Más de uno sobre el desplante de Pere Aragonès al rey este miércoles en Barcelona, sobre el proceso de vacunación y sobre el calendario del Gobierno para los indultos.

Carlos Alsina

Madrid | 16.06.2021 09:07

Llegamos a la segunda mitad del mes de junio con trece millones de españoles ya vacunados del todo. Esto marcha. El objetivo para esta semana ---lo formuló Sánchez en abril--- era alcanzar los quince millones y, en efecto, el domingo habremos llegado ahí.

El proceso de vacunación es, seguramente, lo que mejor estamos haciendo en España desde Semana Santa

El proceso de vacunación es, seguramente, lo que mejor estamos haciendo en España desde Semana Santa (mérito, sobre todo, de los gobiernos autonómicos y del personal de enfermería) y eso está mejorando la expectativa de recuperación económica y, sobre todo, está permitiendo acortar los plazos.

Falta, para rematar el pack de buenas noticias, que la Comisión Europea apruebe el plan que le ha remitido el Gobierno para el uso de los fondos y que estos empiecen a llegar. Es cuestión de días que Ursula Von der Layen (que esta mañana hace escala, por cierto, en Madrid) le dé su bendición al programa que remató la vicepresidente Calviño.

Eso, y el levantamiento que anunció ayer Biden de los aranceles que castigaban productos europeos (españoles como el vino, los lácteos, la carne de cerdo, ¡los berberechos, vicepresidenta), son las dos mejores noticias que llegan estos días desde Bruselas.

Carmen Calvo ha tomado el relevo a Sánchez con la cuenta atrás de los indultos

Y ahora que el presidente Sánchez ha dejado de hacer la cuenta atrás diaria para la inmunidad de grupo (deben de quedar sesenta y tantos días), la señora Calvo ha tomado el relevo con la cuenta atrás de los indultos. Qué nervios, qué cosquilleo, qué poco queda. Tic tac tic tac, que diría el desaparecido Pablo Iglesias.

Tienen que estar terminados no porque haya un plazo establecido, sino porque Pedro Sánchez ha dicho que ya, que los indultos tienen que llegar a la vez que la visita de Pere Aragonés a la Moncloa.

Luego tendrá la gentileza el Presidente de acudir al Congreso a explicar cuál es su plan para Cataluña, o para resolver de una vez lo que se ha dado en llamar la cuestión catalana, o en terminología independentista de ahora, el conflicto. Bien está que acuda el Presidente a explicarse al Parlamento: si estamos, como su equipo mantiene, ante la decisión más relevante de su mandato, un paso histórico, qué menos que acudir a las Cortes a exponer ante la sociedad española que indulta a Oriol Junqueras por el bien de España.

Hay que admitir que se lo ponen difícil a Pedro Sánchez los indultados

Hay que admitir que se lo ponen difícil a Pedro Sánchez los indultados. Y los partidos que dirigen los indultados. Y las asociaciones que dirigieron los indultados.

[[H3:Aragonès el dialogante rehúsa sentarse en una cena con el rey]]

En aras de la concordia y la convivencia, Aragonès el dialogante rehúsa sentarse en una cena con el rey. En aras de la concordia y la convivencia, la portavoz de Esquerra declara que don Felipe no debería poner un pie en Cataluña (tierra hospitalaria). En aras de la concordia y la convivencia la Asamblea Nacional Catalana, que dirigió Jordi Sánchez, llama a la población a quemar fotos del jefe del Estado. En aras de la concordia y la convivencia, Aragonès anuncia que con Puigdemont sí estará encantado de reunirse. En el sofá de Waterloo. El prófugo de la Justicia, según mantiene a día de hoy el gobierno de España. A día de hoy porque pronto mutará también en esto.

Esta noche el Círculo de Economía, asociación catalana de empresas y ejecutivos catalanes, celebra la cena inaugural de sus jornadas de este año. El Círculo es una de las instituciones más influyentes de la sociedad de Cataluña y gusta de entenderse con las administraciones públicas, sean del signo que sean. Comparte el diagnóstico de Sánchez respecto de la nueva etapa, el diálogo y eso que la portavoz Montero llama normalizar la relación de España con Cataluña. Rema a favor tanto de Sánchez como de Esquerra Republicana.

Ausentarse de la cena, como ignorar la presencia del rey en Cataluña, tiene poco de normalidad, de convivencia y de concordia

Declinar la invitación para asistir a la cena de hoy, como ha hecho el señor Aragonés, es naturalmente una forma de despreciar al jefe del Estado, y por tanto al Estado y la sociedad a la que el Estado sirve, la sociedad española. Ausentarse de la cena, como ignorar la presencia del rey en Cataluña, tiene poco de normalidad, de convivencia y de concordia, pero ya se sabe que ahora lo que toca es quitarle importancia a todo lo que haga o diga Pere Aragonés con el argumento de que no tiene más remedio que seguir con estos desplantes porque su parroquia se lo demanda, pero vamos, que en realidad, y en el fondo, y en el fondo del fondo, Aragonés estaría encantado de restablecer la relación institucional de la Generalitat de Cataluña con el monarca. Y dos huevos duros.

Esta noche el nuevo y dialogante President envía a la cena a una consejera. Los más finos analistas sostienen que es un gesto de concordia. Sí, porque podía haber enviado a un bedel, o a muñeco de felpa, y oye, es una consejera. Frente a los finos analistas (que hay veces que se pasan de finos) está la explicación que dio la portavoz del partido de Aragonés. De nombre, Marta Vilalta.

Que no es bienvenido, dice la señora Vilalta. Pero vamos a ver, si le han invitado los organizadores. Organizadores tan catalanes, por cierto, como usted. Es verdad que después de escuchar esto en boca de la portavoz del partido que gobierna Cataluña podría haber salido al paso el Círculo para proclamar que el rey sí es bienvenido, pero... por supuesto no lo ha hecho, no vaya a parecer que busca el enfrentamiento en lugar del diálogo. Aquí el único que puede seguir con el discurso del enfrentamiento, el desdén y los vetos es el gobierno independentista: porque ya se sabe, entiéndalo usted, que es que tienen que tener contenta a su parroquia. No hay que darle mayor importante a los gestos, qué otra cosa iba a hacer Aragonés, lo importante es su decidida voluntad de abrir una nueva etapa de concordia. Con Waterloo, se entiende.