OPINIÓN

Monólogo de Alsina: "Juan Carlos, mundialista"

Carlos Alsina reflexiona en su monólogo sobre las próximas visitas del rey Juan Carlos I a España en el día que se espera que llegue a Vigo desde Londres. Una nueva entrega del serial 'tú a Sanxenxo y yo a la Zarzuela'.

Carlos Alsina

Madrid | 19.04.2023 08:38

Que viene, que viene. En algún momento de la mañana, no se sabe cuál, tomará tierra en Vigo un avión privado, no se sabe de quién, del que descenderá un hombre de ochenta y cinco años que será recibido ya veremos por quién.

Nueva entrega del serial 'Tú a Sanxenxo y yo a la Zarzuela'

En otros tiempos a este hombre le habría estado esperando la plana mayor de las instituciones gallegas y lo más granado de la sociedad civil. Pero hoy, ya no. Hoy este hombre ya no es el que fue. O sí, es el mismo que fue. Pero como se fue por lo que se fue… y como prefiere residir en Abu Dabi… y como aunque siga siendo rey el rey ya no es él… la prioridad de los amigos que le están esperando en Sanxenxo es tenerle a él contento pero sin tocarle las narices al rey que ejerce de jefe del Estado, que es Felipe. Y cuyo entusiasmo por esta nueva entrega del serial ‘tú a Sanxenxo y yo a la Zarzuela’ es manifiestamente mejorable.

La Casa del Rey suspira porque el episodio regatero, o regatista, pase cuanto antes

Hay silencios que son atronadores. La Casa del Rey (del rey que ejerce) suspira porque el episodio regatero, o regatista, pase cuanto antes. Y porque nada pase.

En la víspera, ya hemos contado que don Juan Carlos echó el día en Londres, estuvo un rato con Carlos III (que le habrá explicado, cálidamente, por qué ha preferido no invitarle a su coronación del mes que viene), y se dejó ver en el palco del estadio del Chelsea: ya que estoy en Londres me voy al fútbol.

Ayer se confirmó que el Barça tiene dos portavoces: el del club y la del gobierno de la Generalitat

Raro que no haya salido Laporta a decir que ésta es la prueba de que el Madrid es el equipo del régimen (anterior). O el Chelsea, Joan, que igual es el Chelsea el club por el que beben los vientos los reyes jubilados.

¿Cuál de los dos clubes está más apadrinado por el régimen de turno?

Paréntesis: ayer se confirmó que el Barça tiene dos portavoces: el del club y la del gobierno de la Generalitat. O aún peor, que la portavoz del gobierno catalán se toma como una obligación de su cargo repudiar un vídeo del Real Madrid en el que se recuerdan episodios protagonizados por el Barça bajo el régimen franquista.

Han pasado dos cosas con esto de Laporta y el vídeo de Florentino. Una, que el gobierno catalán ha salido a defender al Barça de la imputación del Madrid. Dos, que ni el gobierno madrileño, ni el gobierno central, han dicho ni media palabra sobre la imputación de Laporta al Madrid. ¿Cuál de los dos clubes está más apadrinado por el régimen de turno?

Campaña de la portavoz del Gobierno contra Feijóo

Portavoces de gobierno en campaña. La del gobierno catalán, contra el Madrid. La del gobierno de España, contra Feijóo, por supuesto. Ni un martes sin que Feijóo reciba en la sala de prensa de la Moncloa. Reciba en el sentido de que le lluevan piedras.

Qué tiempos aquellos en que la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros era un acto informativo, no una extensión de los mítines del PSOE. Urge ponerle público a la ministra Isabel Rodríguez y un grupo de militantes detrás, asintiendo a todo lo que dice, para completar el espectáculo electorero.

Qué tiempos aquellos en que la rueda de prensa tras el Consejo de Ministros era un acto informativo, no una extensión de los mítines del PSOE

Dale que te pego. Indignado el Gobierno porque hay presidentes (o presidenta) autonómicos que han dicho que la parte de la ley de Vivienda que es opcional (queda a criterio de los gobiernos autonómicos aplicar el tope al alquiler o las zonas tensionadas) optarán por no aplicarla.

En lugar de criticar la decisión política de no topar, el Gobierno critica una presunta insumisión ilegal. Que no parece, leída la ley, que en realidad lo sea.

La Junta de Andalucía es "ilegal, irreal, irresponsable"

En la misma comparecencia, el ministro Planas acusó también de ilegalidad a la Junta de Andalucía, por lo del plan de regadíos en el entorno de Doñana.

Triple: ilegal, irreal, irresponsable. Dicen las crónicas: el Gobierno endurece el discurso contra el PP. Bueno, endurecerlo más es difícil. Acuérdese que el señor Gómez de Celis, vicepresidente del Congreso de los Diputados, acusó el jueves a setenta y dos diputados del Parlamento Andaluz de practicar el terrorismo (medioambiental). Hay cimas de la hipérbole descalificatoria que son imposibles de superar.

Con este partido que incumple la ley, incumple la Constitución, va en contra de los españoles y nunca ha hecho nada por las mujeres -qué terrible todo- es con el que ha cocinado el PSOE la marcha atrás en la ley del 'sólo sí es sí'. Consumado ayer el matrimonio temporal en la comisión de Justicia del Congreso y en puertas de que mañana quede definitivamente remendada la reforma que el Gobierno alumbró con tantísimo entusiasmo (y que se ha convertido en su mayor bochorno).

Mañana se abrirán las puertas del infierno, a juicio de Podemos, Esquerra y Bildu, cuando el PSOE vote de la mano del PP y le corrija la plana a Irene Montero

Mañana se abrirán las puertas del infierno, a juicio de Podemos, Esquerra y la señora de Bildu, cuando el PSOE vote de la mano del PP y le corrija la plana a Irene Montero. Pero ni esta alianza temporal ha evitado, como se ve, que el PSOE le arree hasta en el carné de identidad al PP esta semana ni evitará que el viernes sigan presumiendo de Gobierno de coalición socialistas y Podemos. O socialistas, Podemos y Yolanda Díaz. Las palabras se las lleva el viento.

El coraje de Díaz en la defensa de una posición

Mire lo que pasó ayer con la vicepresidenta segunda (marca) en la ONU. Que le pregunta un periodista si mantiene lo que dijo donde Évole sobre Marruecos -que es una dictadura- y Díaz no le responde.

Que como Marruecos ha apoyado una resolución, ya no toca decir que es una dictadura. A esto se le llama coraje en la defensa de una posición. Ni cuarenta y ocho horas ha durado la severa refutación del régimen de Mohamed VI. Y se ve que en cuanto ya no está Évole delante, deja de responder a lo que se le pregunta. ¡Vuelve, Jordi!

El Constitucional ha pisado el acelerador

Al Tribunal Constitucional habrá que reconocerle que ha pisado el acelerador para desahogar trabajo pendiente. Le ha metido ritmo Pumpido. Ayer avaló la ley de Educación que el Parlamento aprobó en 2020. Bautizada por los medios con el apellido de la ministra, ley Celaá. La bendice en su integridad, dando la razón a la ministra -hoy embajadora en el Vaticano- y negándosela a quienes la recurrieron.

Como esta vez el fallo es favorable al Gobierno, no escuchará usted a ningún ministro decir que el Tribunal ha estado dividido o que ha habido cuatro votos particulares.

En su momento se cuestionó mucho si era constitucional que el castellano, lengua oficial del Estado, no fuera lengua vehicular en las comunidades que tienen lengua propia. O por ir al asunto, si era constitucional que la escuela catalana tuviera como única lengua vehicular el catalán. Y el Constitucional, en línea con sus sentencias anteriores, dice que sí. Que la llamada inmersión lingüística es constitucional, siempre que respete un cierto equilibrio con la otra lengua oficial, que es el español.

Es constitucional que la escuela catalana tuviera como única lengua vehicular el catalán

En qué consiste ese cierto equilibrio viene siendo objeto de debate político y judicial en Cataluña desde hace décadas. Por eso fue el Tribunal Superior de Cataluña quien concretó ese equilibrio en el 25% de las asignaturas troncales en castellano. Sentencia anterior a la nueva ley de lenguas catalana que Esquerra pactó con el Partido Socialista de Salvador Illa.

Los socialistas, en este asunto, siempre han estado en misa y repicando. Illa presentó como una conquista, hace un año, haber metido en esta nueva ley que el castellano es lengua de aprendizaje, que no es lo mismo que vehicular aunque se le parezca. Pero acuérdese de que el día que hablamos con él y explicó lo satisfecho que estaba hubimos de recordarle que había sido su Gobierno, la ley Celaá, quien había suprimido de la ley estatal la condición del castellano como lengua vehicular. Yo lo quito, yo lo pongo.

Por dónde se sale de la trampa que yo mismo me he tendido. Un saludo a la ministra Celaá, que ahora disfruta de Roma y de representar a España ante un papa que está en contra del aborto, la transexualidad y la eutanasia.