La reciente condena a Cristina Fernández de Kirchner, que cumple arresto domiciliario por motivos de edad, ha reavivado el debate sobre la polarización política en Argentina y el papel del peronismo en la oposición al gobierno de Javier Milei. Sindicatos y organizaciones sociales se han movilizado en apoyo a la exmandataria, mientras el país observa cómo se reconfigura el escenario político tras la sentencia.
El peronismo ante la condena de Cristina Kirchner
El periodista Juan Dillon destaca la capacidad de convocatoria del peronismo, subrayando que "para los peronistas no es un partido político, sino un movimiento. Y el movimiento puede disfrazarse tanto de un candidato conservador, un candidato del centro o un candidato de izquierda".
Según el periodista, el peronismo sigue siendo uno de los artefactos políticos "más interesantes, apasionantes y desconcertantes" de la región.
¿Extinción o reconfiguración del kirchnerismo?
Dillon plantea que no se trata de la extinción del kirchnerismo, sino de una posible reconfiguración: "Estamos frente a la reconfiguración moderna, un neo kirchnerismo potenciado por este discurso de victimización frente a la justicia". El analista compara la situación argentina con fenómenos globales de polarización y populismo, mencionando ejemplos como Trump, Bolsonaro o Erdogan.
La oposición frente a Javier Milei
Respecto a la capacidad de la oposición para enfrentarse al gobierno de Javier Milei, Dillon señala que la condena a Fernández de Kirchner cambia el tablero político: "La posibilidad de enfrentar y demostrar la contradicción era Cristina Fernández de Kirchner para Javier Milei, no para el presidente. Le sacan al presidente a su archienemiga, como si fuera un cómic de la televisión". Además, compara figuras políticas argentinas con referentes españoles para ilustrar la dinámica de los bloques políticos.
Polarización y populismo: un fenómeno global
La entrevista concluye con una reflexión sobre la polarización política, que, según Dillon, ya no es exclusiva de Argentina:
"Vivimos un momento de enfrentamiento en el que no hay prácticamente grises ni matices, ni lugares para el encuentro. Y en eso puede que haya sido también bastante precursora Argentina, pero ya está totalmente extendido por todo el mundo".