Los trabajadores que cobren el nuevo salario mínimo interprofesional (SMI) de 1.184 euros brutos mensuales en 14 tendrán que tributar, por primera vez, por el impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Tras la aprobación este martes de la nueva subida del SMI en el Consejo de Ministros, Hacienda despejó la duda sobre uno de los temas más controvertidas de la medida: si se volvería a ajustar (o no) el mínimo exento de IRPF.
Hacienda finalmente ha decidido mantener el mínimo exento actual y no ajustarlo al incremento del SMI, provocando el enfado de la vicepresidenta segunda del Gobierno Yolanda Díaz, que apostaba por volver a subirlo como en las anteriores ocasiones.
Nuevo choque en el seno del Gobierno de coalición
El desencuentro entre la parte socialista del Gobierno y la ministra de Trabajo se evidenció este martes en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Pilar Alegría y Yolanda Díaz escenificaron el choque con gestos, risas, y murmullos...La ministra de Trabajo llegó a decir incluso que conoció la decisión de Hacienda por los medios de comunicación, mientras que Alegría le reprochó que "eso no es así".
"No ha habido ni comunicación ni deliberación", afirmó Yolanda Díaz, quien señaló que la "justicia fiscal" debe "empezar por arriba", mientras que Pilar Alegría justificó que la idea del Ministerio que dirige María Jesús Montero es que esta recaudación tiene como objetivo mejorar los servicios públicos de todos los ciudadanos.
Los trabajadores que tributarán el IRPF con el nuevo SMI
Además de mejorar los servicios públicos, tal y como defendió ayer Pilar Alegría, la decisión de Hacienda implica que desde este mes, las empresas comenzarán a descontar 21,4 euros de la nómina de todos los trabajadores que perciben el SMI.
Lejos de los 50 euros brutos más al mes prometidos por el Gobierno, el aumento mensual que los trabajadores que perciban el SMI verán en sus nóminas a partir de ahora será de 28,6 euros. A lo largo del año, el total de la retención será de 300 euros en 14 pagas.
Así, Hacienda se quedará con el 42,8% del incremento anual de 700 euros aprobado en el Consejo de Ministros, lo que significa que de los 700 euros brutos, los trabajadores recibirán finalmente 400 euros netos.
En cuanto a los trabajadores afectados por la mediada, serán los solteros sin hijos, que representan aproximadamente el 20% de los perceptores del SMI (alrededor de medio millón de personas) los que verán más mermada su nómina tras el incremento del SMI.
No obstante, cabe destacar, que a pesar de esta medida, la tributación del SMI en España sigue siendo una de las más bajas de la Unión Europea. Según datos de Eurostat, los contribuyentes de menos ingresos en España pagaron un 6,7% en impuestos en 2023, muy por debajo de la media comunitaria del 19%.
