El 65% de los españoles usa el dinero en metálico en su día a día. El efectivo continúa siendo el método de pago preferido para 6 de cada 10 españoles que lo utiliza a diario en establecimientos físicos, seguido de la tarjeta de crédito que es usada por 2 de cada 10. En tercer lugar, se encontrarían los dispositivos móviles, que emplean el 10% de los encuestados, una tendencia que no obstante va in crescendo, según el "Estudio sobre hábitos en el uso del efectivo 2023" publicados hoy por el Banco de España.
La comodidad, la costumbre y el control de gastos son las razones que nos hacen decantarnos por el uso del efectivo. La rapidez y la comodidad hacen que la balanza se incline más del lado del dinero de plástico y los dispositivos móviles. A corto plazo no se esperan cambios en el uso del metálico. Dos de cada tres encuestados no piensa cambiar sus hábitos dentro de un año, aunque esta percepción varía según la edad. El 39% de los menores de 35 años cree que el uso del efectivo disminuirá con el tiempo.
La edad y los estudios son determinantes en el uso de los medios de pago
Las personas mayores de 65 años son las que pagan en efectivo a diario, mientras que los de entre 25 y 44 años utilizan más la tarjeta. Los más jóvenes, los menores de 25 años, son los que se decantan más por sus dispositivos móviles.
Respecto al nivel de estudios, las personas con estudios básicos son las que más usan el efectivo. Los que tienen estudios medios y superiores son los que optan más por el dinero de plástico. Los móviles mayoritariamente son los favoritos de los titulados superiores.
El efectivo continúa aceptándose en casi todo el pequeño comercio y hostelería. Las tarjetas y teléfonos solo se admiten entre el 78 y 89% de estos los establecimientos.
El cajero es la principal fuente de obtención del dinero en metálico para 3 de cada 4 ciudadanos. Los puntos de retirada se perciben algo más alejados que en 2022, no obstante 8 de cada 10 personas puede acceder a ellos a menos de un kilómetro.