El pasado mes de abril se envió un primer cuestionario, analizándose las respuestas de este para alcanzar los objetivos antes expuestos, mientras que la segunda encuesta se realiza en el periodo temporal que abarca del 11 de noviembre al 1 de diciembre, con el objetivo de contrastar las respuestas actuales con las de hace 7 meses, analizando si las expectativas de los empresarios y empresarias han mejorado.
En cuanto a la composición por número de empresas, predomina el sector servicios (46%), seguido de la industria (33%) y la construcción (21%). La tendencia respecto a facturación es la misma, siendo el sector servicios el que mayor peso presenta con un 64%, seguido del industrial (35%) y, en menor medida, de la construcción (1%).
En lo que corresponde a la actividad por CNAE en número de empresas predomina el comercio al por mayor y al por menor; reparación de vehículos de motor y motocicletas, seguido de la industria manufacturera y construcción. Sin embargo, en cuanto a facturación, el comercio está aún más representado, a diferencia de la industria manufacturera y la construcción, pues el sector del suministro de agua, actividades de saneamiento, gestión de residuos y descontaminación se encuentra en segunda posición.
Esta área industrial representa un volumen importante en el municipio de Orihuela, que ha ido variando a lo largo de los años. Para ello, se ha representado un gráfico viendo el peso de la entidad en los últimos años a nivel de facturación y de número de trabajadores y trabajadoras. En cuanto al peso de Puente Alto a nivel de facturación, se observa cómo ha aumentado su representatividad en la economía de Orihuela con respecto a 2019, alcanzando un 26,57% de la facturación total. Además, tiene un peso de 1,17% respecto a la provincia de Alicante.
En cuanto al peso del polígono industrial Puente Alto a nivel de trabajadores/as, se observa cómo también ha crecido con respecto al ejercicio anterior. En 2019, la representatividad de los trabajadores/as de Puente Alto en Orihuela ha sido del 13,85%.
En uno de los apartados se explica y se compara la situación de las empresas de la entidad ante la situación de incertidumbre económica ocasionada por el COVID-19 que se arrastra desde hace varios meses. Esta es la segunda encuesta realizada a las empresas asociadas a Puente Alto, sirviendo de comparativa con respecto a la realizada en mayo. Si en la primera encuesta el sector mayoritario era el primario, en esta segunda, está más repartido entre “comercio”, “agricultura, ganadería, silvicultura y pesca” y “otros servicios”. La industria manufacturera pierde representatividad respecto a la primera encuesta.
De esta forma, el 60% de las empresas encuestadas pertenecen al sector servicios, el 27% al sector primario y el 13% al industrial. Casi el 70% de las empresas encuestadas son microempresas según su facturación, frente al 50% de la primera encuesta. En esta segunda encuesta se reduce el peso de las PYMES, al tiempo que aumenta la participación de grandes empresas hasta un 7%.
Casi la mitad también son microempresas según su número de trabajadores/as (47%). El número de pequeñas empresas disminuye, agrupándose en su mayoría entre las que cuentan con un número de trabajadores/as entre 10 y 25, a costa del incremento de las medianas y grandes empresas, que alcanzan un 13% en esta ocasión.
La mayoría de los/as encuestados/as no han notado un alto impacto en estos factores, tan solo para un 13% lo ha sufrido respecto a la liquidez y el nivel de endeudamiento, pero en relación a este último, más de la mitad considera que el impacto ha nulo o muy bajo. La productividad de la plantilla parece que tampoco ha sufrido un impacto elevado. Sí que el 40% afirma un impacto moderado en la rentabilidad y el impagado de clientes.
En esta segunda encuesta, parte de las empresas relacionadas con “comercio” y “otros servicios” son las que mayor impacto tendrán sobre la facturación, al disminuirla entre un 25% y un 50%. En la primera encuesta, el 33% del sector del comercio pensó que facturaría menos de la mitad.
Por otra parte, entre las que estiman que crecerá su facturación o será similar a la del 2019, destacamos las relacionadas con la “agricultura, ganadería, silvicultura y pesca” y la “industria manufacturera”.
Ninguna empresa planea reducir plantilla más del 25% en esta segunda encuesta, a diferencia de la primera. Se pasa de un 50% a un 33% de empresas que reduzcan su plantilla entre el 0% y el 25%. Se dobla el porcentaje de empresas que no hará ajuste de plantilla, de un 31% de la primera encuesta al 60% en esta segunda. Se mantiene el número de empresas (7% del total) que tendrán que reforzar plantilla.
En esta segunda encuesta, las empresas relacionadas con “comercio” e “industria manufacturera” son las que mayor impacto tendrán en plantilla, pues parte de ellas tendrán que reducir entre el 0% y el 25% su plantilla. El impacto estimado en la primera encuesta fue mayor, pues estas preveían que tendría que reducir sus plantillas hasta la mitad.
Por otra parte, entre las que estiman que crecerá su plantilla, destaca la mitad de la “industria manufacturera”. Ninguna empresa de la “agricultura, ganadería, silvicultura y pesca” tiene pensado hacer ajuste de plantilla.
En la anterior encuesta, las medidas que más pusieron en marcha las entidades fue la reducción de su actividad (44%) y de la plantilla (38%), mientras otro 6% estaba implantando el teletrabajo y reconvirtiendo su negocio. En esta segunda encuesta, la mayoría pretende mejorar sus procesos para aumentar la productividad. (67%). Tan sólo un 13% no tomará ninguna medida, y sólo un 7% piensa llevar a cabo un proceso de transformación digital. La medida más solicitada en la anterior encuesta fue la agilización de pagos pendientes por parte de la administración (56%) y facilitar material de protección en todos los centros de trabajo (50%).
Unos meses después, son aún más las empresas que reclaman una menor carga impositiva y una reducción de las cuotas a la Seguridad Social, porcentaje que asciende hasta el 60%. Igualmente, este porcentaje reclama mayor flexibilización laboral. Como novedad, una de las acciones más reclamadas es la ayuda a la digitalización de las PYMES y a la formación del personal. Los programas de infraestructuras sostenibles es la menos valorada en esta segunda encuesta.
La mayoría de los/as encuestados/as (67%) no dispone de canales de venta online. Un 33% disponía de él antes de la crisis sanitaria. Además, de los que no disponen de este canal, un 70% tampoco tendría la intención de implantarlo.
En todos los casos, al menos un 67% de los/as empresarios/as considera vitales todos los servicios de la EGM. Sin embargo, el asesoramiento empresarial es considerado como poco necesario por un 33% de las empresas encuestadas.
Por otra parte, el 75% consideran de vital importancia en su área industrial servicios como: Saneamiento mediante una red separada de aguas pluviales y residuales. Disponibilidad de suministro eléctrico en baja y alta tensión y los accesos, viales y rotondas amplias.
Como se ha comentado a lo largo del estudio, el impacto económico de la crisis provocada por el COVID-19 tendrá efectos considerables en el Polígono Industrial Puente Alto. En este punto, se ha estimado cuál será ese impacto en dos aspectos principales: la facturación y el número de empleados. Se prevé que la facturación se contraerá mucho más de lo que lo harán las plantillas. Esto significa que, o bien los empresarios harán ciertos esfuerzos para mantener a sus trabajadores o bien que a los empleados que se encuentran en situación de ERTE no se consideran como reducción de plantilla.
Hay una tendencia positiva en la facturación y número de empleados desde el 2014. Sin embargo, se estima una contracción en la facturación de casi el 20% para el año 2020, debido al impacto económico del COVID-19. La contracción se prevé que sea mucho menor respecto a la plantilla.
Se obtiene que la facturación del Polígono Industrial Puente Alto se contraerá un 19,66%, mientas que las plantillas de esta asociación se contraerán únicamente un 3,47%.
En comparación con las entidades federadas de FEPEVAL más representativas y su comparativa con el promedio en lo que respecta a variación del nivel de facturación y de plantillas a causa del COVID-19, se observa que Puente Alto tiene un mayor impacto sobre la facturación, de casi 8 puntos porcentuales por encima de la media, al contrario que veíamos en la primera encuesta y un menor impacto en plantillas, de casi un 4% menos que el promedio.