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30ytantos: Brazos sin colgajos

La flacidez en los brazos es un problema que incomoda y acompleja a muchas mujeres que hasta cambian su forma de vestir para ocultarlos. A los brazos les pasa como a las manos, que tras muchos años sintiéndose los olvidados de nuestros cuidados, se vengan y se convierten en los grandes delatores de la edad. La flacidez en los brazos es inevitable salvo que la hayamos prevenido practicando con asiduidad por ejemplo boxeo, tenis o natación. Esa pérdida de firmeza es de las más complicadas de corregir sin pasar por el quirófano y siempre ha sido la asignatura pendiente del rejuvenecimiento… hasta ahora!.

ondacero.es

Madrid | 06.02.2014 15:06

Con el tiempo la piel de la zona de los brazos, sobre todo en la cara anterior e interna, pierde elasticidad y cuelga provocando un efecto muy antiestético. Esa flacidez no se corrige trabajando el músculo ya que hay una pérdida de grasa y lo que cuelga es precisamente es esa parte blanda y las soluciones médico-estéticas no invasivas, ácido hialurónico, vitaminas… hasta ahora no han dado grandes resultados. Tampoco la aparatología. Por ejemplo, los resultados de la radiofrecuencia en la zona no son homogéneos porque sobra decir que radiofrecuencias hay muchas y no todas son efectivas. Antes de llegar a un lifting braquial o braquioplastia, que es como se le llama a esa operación quirúrgica para eliminar la flacidez de los brazos, hay una solución medico estética no invasiva que está dando unos resultados asombrosos.

Se trata del tratamiento creado por Moisés Amselem, referente en la medicina estética, formador de especialistas y creador de muchas de las técnicas que hoy en día se usan en las clínicas. El doctor, que desde hace años ha estado investigando como poder dar una solución real a los casos de brazos descolgados que le llegaban a su consulta, lo que ha descubierto y demostrado en un estudio clínico con 30 pacientes, es que estimulando la creación de colágeno en esa zona, de la misma manera que se hace en el rostro, se consigue devolver la firmeza a los brazos.

El producto que se inyecta es un inductor de colágeno compuesto por hidroxiapatita cálcica, un mineral que conforma los huesos y que ha demostrado ausencia de toxicidad  y carboximeticelulosa, un compuesto orgánico derivado de la celulosa. Esta sustancia, de nombre comercial Radiesse, una vez inyectada en la piel lo que va a hacer es recuperar el volumen perdido sobre todo en la cara anterior e interna de los brazos y poco a poco reafirmar la zona. Es un tratamiento que devuelve el aspecto joven a los brazos estimulando el colágeno por lo que no es para todas las edades ya que todos los inductores de colágeno tienen un límite de edad.

Como sabes a partir de los 65 años ya no habría colágeno que generar por lo que no sería eficaz, así que mejor no rozar el límite y ser prevenido. El tratamiento es indoloro porque el producto se mezcla con Lidocaína y porque la técnica hace que así lo sea ya que se inyecta con microcánulas que además evitan la formación de hematomas. Son dos sesiones espaciadas en un mes y el resultado se mantiene alrededor de un año. 
¡A Cuidarse!

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