Un auténtico ejercicio de supervivencia en cada una de las eliminatorias hasta ir noqueando a sus rivales por convencimiento y fe.
Y en la final otro tanto de lo mismo, Aguantar durante muchos minutos el acoso y asedio del equipo Ingles hasta esperar su oportunidad de darle el mazazo en forma de gol y colocarse por delante en el marcador.
Prácticamente la misma historia de toda la temporada, de toda la Champions League.
Una de las importantes explicaciones y más significativas ha sido el extraordinario rendimiento del portero belga Tibout Courtois , que si hubiera justicia estaría nominado al balón de oro de esta temporada.
Una vez más fue el gran salvador de los blancos, y en hasta nueve oportunidades claras de gol evitó con sus intervenciones e imposibilitó que los méritos en el juego del equipo inglés se tradujeron en goles y ventaja.
El portero belga marcó todas las diferencias habidas y por haber como durante muchas fases del torneo y también de la liga.
Debería abrirse el debate de porque los porteros nunca han ocupado una posición predominante en la clasificación final de los mejores de la temporada cuando este año es indiscutible que ha sido decisivo y fundamental en la consecución de los títulos Del Real Madrid.
El Real Madrid tiene un gen especial y una actitud ante la Champions que no tiene ningún otro club del mundo, solo eso puede explicar los 14 títulos que ha conseguido en su historia y que sin ser el mejor equipo muchas de ellas haya logrado el éxito final.
Lo ocurrido el sábado fue una prolongación de todo lo que habíamos venido viviendo en las anteriores eliminatorias en las que el Madrid estuvo absolutamente contra las cuerdas y al final noqueó a su rival.
Es fútbol. Es la Champions. Y es el Real Madrid en Europa.