Es verdad que este es un proyecto en construcción y recién montado con muy poco tiempo para sentar las bases. Es verdad.
Pero también lo es que hay mimbre suficientes como para que el equipo tenga un mayor rendimiento a nivel individual por la calidad y categoría de los futbolistas.
Siempre hemos hablado de un importante fondo de armario que permitiría acometer todas las competiciones con ciertas garantías y al entrenador tener la variedad suficiente como para ir refrescando el equipo.
Y ese momento de refrescar el equipo ha llegado ahora.
Después del parón de selecciones el rendimiento de varios jugadores y del equipo en colectivo ha decaído considerablemente y fruto de ello se han producido malos resultados que dejan al equipo en una situación muy complicada en Europa y delicada en la liga.
El principal señalado es indiscutiblemente Sergio Busquets cuyo rendimiento en los últimos partidos ha dejado bastante que desear ya sea por cansancio físico o mental o porque el equipo tampoco le ayuda y le deja muy solo en la zona ancha del terreno de juego, a la intemperie y muy vulnerable ante los rivales en especial si estos son de la calidad del Inter o el Real Madrid. Ya el entrenador ha dejado entrever que nadie es intocable y que todos tienen que estar pendientes para cuando les tenga que tocar jugar. Da la sensación de que a Busquets le vendría bien un descanso tanto mental como físicamente para afrontar lo que viene después de esta semana, los choques ante el Bayer de Munich y el Viktoria Pilsen si todavía le quedan opciones al Barcelona de clasificarse para los octavos de final de la liga de campeones.
Pero no solo el capitán, hay futbolistas como los dos extremos Dembele y Rafinha que no están dando el nivel que cabía en los últimos encuentros y no marcan las diferencias mientras que Ansu Fati y Ferran Torres parecen estar pidiendo a gritos entrar y tener su oportunidad. De lo mejor que quedó en el Bernabéu fue la sensación de peligro que generaron ambos en los últimos minutos del encuentro, incluido el gol del valenciano. Gavi debe ser imprescindible por su momento de forma y el arranque de temporada que está realizando, pero una vez que Busquets vaya al banquillo parece que de Jong será el volante central y tendrá como del jugador sevillano.
Y luego está la defensa donde más problemas están cometiendo y donde tiene que apuntalar más Xavi.
Posiblemente en cuanto que Kounde coja la forma será mucho más fácil pero hace falta acertar con sus compañeros de zaga. Apostar por Balde o por Marcos , darles confianza y minimizar los errores tan graves que comete el equipo en defensa. Muchas decisiones y muy importantes las que debe tomar Xavi para los próximos partidos.