Hace mucho tiempo, 28 años que España no perdía un partido clasificatorio para una fase final mundialista y a las primeras de cambio que pierde se complica sobremanera su presencia en el Mundial invernal de Qatar 2022.
La selección española vive un momento de transición, larga y difícil transición al pasar de una época dorada en la que dominamos el fútbol mundial durante un quinquenio con enorme superioridad y en la que conseguimos ganar dos Eurocopas y un Mundial en un hito irrepetible, a buscar un relevo generacional de un grupo extraordinario. Y eso no es fácil.
En la Eurocopa España ofreció una buena imagen y dio muy buenas sensaciones. Se quedó a las puertas de la final y mereció más, pero ayer en Estocolmo ofreció una cara más vulgar, de un equipo accesible y que doblegó la rodilla ante el ímpetu de los suecos.
Vaya por delante que la selección sueca es un muy buen equipo. Isak y Kulusevski hicieron un partidazo, y que puedes perder ante un rival así, pero la imagen que ofrecieron los hombres de Luis Enrique no fue la mejor. Imprecisos, fallones a más no poder, blandos, poco intensos …en fin un cúmulo de circunstancias que provocó la inesperada derrota y que nos complica mucho acceder al Mundial.
Porque este año solo acuden directamente los campeones decada grupo y porque la repesca será de las más duras de mucho tiempo y solo hay tres plazas . Por lo que se ve caerán en ella muchas selecciones de un nivel considerable. Vamos que mejor no tener que disputarla por el enorme riesgo que conlleva, aunque España la tiene garantizada al ser semifinalista de la Europa Nations League.
La ausencia de piezas importantes en este grupo como Pedri, Oiarzabal o Dani Olmo, el arranque prácticamente en pretemporada han devaluado al grupo español que apenas tiene margen de error. Tenemos que esperar un fallo de los suecos, un equipo muy regular y muy ordenado defensivamente para tratar de ganar el primer puesto. Grecia en Atenas puede ser nuestra esperanza pero las cosas como son , a día de hoy existen muchísimas posibilidades de que España acabe jugando la repesca.
Eso sí, consúelense, la última vez que jugamos una repesca acabamos ganando una Eurocopa.y es que el que no se consuela es porque no quiere.