El nuevo delantero espanyolista se mostró rotundo sobre lo ocurrido al final de la pasada campaña, cuando le apareció la oportunidad de jugar en el Sevilla. "Me sentí engañado. Se me prometieron unas cosas que luego no se cumplieron. Soy muy honesto y eso es lo que me dolió del Alavés. Se me mintió a la cara y lo pasé mal. Era una oportunidad buena para mí pero cambié el chip".
Joselu era una buena opción para el Sevilla de Lopetegui, que semanas más tarde ficharía a Rafa Mir, procedente del Wolverhampton, por seis temporadas en una operación que rondó los 16 millones de euros, entre fijo y variables.