No queda ni raro hablar de algo que va a ocurrir en junio próximo. Con la actual meteorología, sobre todo el mercurio, encaja perfectamente ese anuncio hecho ayer en Málaga, de que Marbella ha vuelto a ser la elegida de toda España y de parte del mundo, para ser la sede, una de ellas, de una prueba deportiva náutica internacional. Y así se volvió a destacar.
Son dos marcas potentes de por sí. Unidas, más todavía. Marbella y Puerto Banús. El respaldo institucional es otro sumando. Hacía tiempo que no se aludía a la colaboración público-privada, tantas veces mencionada años ha. Aquí está de nuevo.
Se trata de la E1. Para resumirlo, es como la Fórmula 1 del mar pero con lanchas eléctricas.
Y no puede tener más imanes: el de los nombres propios, con deportistas y artistas de renombre internacional; el de la sostenibilidad, ¡cómo no! Con lo que vende ella sola, bastaría. También el de la Igualdad, que tiene todavía más fuerza que la otra.
Quedan casi en un segundo plano los números que manejan, el “retorno” que se dice ahora, otro vocablo de los habituales. Todos en millones.
No parece tan difícil.