OPINIÓN

Monólogo de Alsina: "El Gobierno habla, pero no informa"

Carlos Alsina reflexiona en su monólogo sobre la escasa información que aporta el gobierno en relación a la salida de Brahim Ghali de España.

Carlos Alsina

Madrid | 02.06.2021 08:46

Con lo que duran las ruedas de prensa de la ministra portavoz los martes y la poca información que facilita. Qué poco le cunden las frases. Y que afán por emitir opiniones personales sobre lo mal que lo hace todo la oposición.

La ministra portavoz Montero "no sabe, no le consta"

Sobre el avión argelino que venía por Brahim Ghali y se dio la vuelta, que no sabe, no le consta, que de qué avión me habla. Sobre meter a Oriol Junqueras en la mesa de negociación con Sánchez que vaya usted a saber, que puede ser, que ya veremos. Sobre cuándo se celebrará el debate sobre el estado de la nación, que ya me dirá usted, que qué necesidad con lo mucho que habla ya el presidente y lo volcado que está en la vacunación. Respuestas, cero. Ah, salvo cuando se le menciona la manifestación del día 13.

Entonces la portavoz del Gobierno se transforma en portavoz del Partido Socialista: "No encontrará ninguna bandera vinculada al Partido Socialista", y cumple con su costumbre semanal de arremeter contra la oposición: "Me parecía bastante poco pensable que PP, Vox y Ciudadanos protagonizaran juntos una nueva manifestación en la foto de Colón".

Las comparecencias en la Moncloa son la manera en que el Gobierno comunica a los ciudadanos las decisiones que toma. O eran, en tiempos remotos. Hoy son una especie de debate con los adversarios políticos ausentes.

El contagio del discurso indepe

Lo pone difícil el gobierno porque no hay día en que no modifique alguna de sus prédicas. Una de las más asentadas era ésa que decía que la mesa de negociación con que fue obsequiada Esquerra a cambio de la abstención en la investidura de Sánchez no era un foro de partidos para puentear al Parlamento sino un instrumento de diálogo entre el gobierno central y el gobierno autonómico de Cataluña, o en la terminología independentista que se plasmó en el papel que el PSOE le firmó a Esquerra, la mesa entre gobiernos, como si fueran gobiernos iguales de dos estados distintos.

Bueno, ahora queda de manifiesto que siempre fue una mesa de partidos y así se repartieron los sillones: el PSOE, Podemos, Esquerra, En Común y Junts per Cataluña. Y como es una mesa de partidos, Esquerra quiere tener ahí sentado a Oriol Junqueras, que carece de cargo alguno en el gobierno catalán porque está inhabilitado pero cuya presencia es la forma que tiene Esquerra de subir la apuesta. Como el gobierno catalán puede enviar a la mesa a quien quiera, pues a tragar con Junqueras, subiendo la apuesta.

Un ciudadano inhabilitado para desempeñar un cargo público porque abusó de su poder, negociando ahora el futuro de Cataluña y el resto de España

¿Qué opina el gobierno de España de que se le reclame ya la presencia de Junqueras con todos los honores como pope negociador sin estar todavía ni siquiera indultado? Pues a la portavoz Montero no parece que le suene mal: "Habrá que ver si, después de las reuniones bilaterales entre el presidente del gobierno y Aragonès, se puede plantear".

Se puede plantear. ¿Qué problema hay? Un ciudadano que está inhabilitado para desempeñar un cargo público porque abusó de su poder, negociando ahora el futuro de Cataluña y del resto de España. Lo pone difícil el Gobierno y se lo pone difícil a sí mismo el Gobierno para andar encajando a martillazos cada día sus propias incoherencias.

El presidente Sánchez ya no acusa de revanchismo y afán de venganza a quienes discrepen de su doctrina indultante (es un detalle por su parte). Pero la portavoz del gobierno sí atribuye a quienes se opongan al indulto ceguera y fingimiento.

Ayudaría que la portavoz del Gobierno aprendiera a decir algo tan básico como Cataluña y el resto de España. Que se ha abonado a hablar de Cataluña y España como si fueran realidades separadas

Ayudaría que la portavoz del Gobierno de España aprendiera a decir algo tan básico como Cataluña y el resto de España. Que se ha abonado a hablar de Cataluña y España como si fueran realidades separadas. Ay, el contagio del discurso indepe, que alcanza hace tiempo a la mesa del consejo de ministros.

Una vez más habrá que recordarle al Gobierno, y a su portavoz, que su tarea es ofrecer la información y explicar sus razones para sostener que el indulto es una buena idea, no dedicar cada hora del día a atacar a quienes no comparten su punto de vista acusándoles, ahora, de no enterarse de lo que ha pasado. El Gobierno está en su derecho a tomar decisiones y está en la obligación de explicarlas, pero haría bien en aceptar con naturalidad que no haya interpretaciones distintas a la suyas y que eso no convierte a los demás en vengativos, ni en ignorantes, ni en ciegos. Simplemente, discrepan, señora ministra. Ni son monos, ni se tapan.

Brahim Ghali abandona España

Brahim Ghali declaró ante el juez Pedraz de la Audiencia Nacional, éste no vio necesario imponerle ninguna medida cautelar y, tras la peripecia del avión argelino que venía para llevárselo de regreso a Argelia fue anoche cuando embarcó –--no en Logroño sino en Pamplona--- para poner tierra de por medio con España. No debía de estar el hombre tan débil como había dicho su abogado.

Se ve que se fortaleció de manera acelerada porque anoche voló. Lo que no pudo ser por la mañana en Logroño ---que aterrizara el vuelo-taxi enviado por el gobierno argelino para sacarlo de aquí--- acabó siendo de noche y en Pamplona. Declaración como imputado, alta hospitalaria y vuelo de regreso a Argel, todo en el mismo día. Qué máquina. A ver cuántos comunicados hace hoy el ministro de Exteriores marroquí, que anteayer proclamaba que con la citación judicial no bastaba, que España tenía que hacer más. Y a ver cuánta información se anima a dar hoy el Gobierno (el nuestro) sobre el episodio de ayer: un avión del estado argelino que despega con intención de aterrizar en Logroño y sólo al estar sobrevolando Ibiza es informado de que en Logroño no está operativo.

Explicación del ministro que más sabe de aeropuertos y vuelos polémicos en España, José Luis Ábalos: "El avión había notificado un plan de vuelo y tenía intención de dirigirse a Logroño. lo que se le dice es que Logroño no tenía los dispositivos para acoger a un avión de este tipo, como un dispositivo de bomberos. No teniendo esa disposición, el avión regresó".

De modo que el Gobierno estaba al tanto de que el avión venía desde primera hora de la mañana. La única a la que no debieron contárselo fue la ministra portavoz, sabiendo que el tema Ghali le caía seguro en la rueda de prensa.

Hoy seguro que el Gobierno ofrecerá ya toda la información que hasta ahora no ha dado, ¿verdad?, sobre esta peripecia fantasmal que empezó con el traslado a España del líder del Polisario, en estado gravísimo, según se dijo, e internado con identidad falsa en Logroño ---qué tendrá Logroño--- y que le dio al gobierno de Marruecos la coartada para echar combustible a la caldera de la soberanía del Sáhara Occidental.