ENTREVISTAS EN LA BRÚJULA

Diego Garrocho: "Lo atrevido de verdad, lo valiente de verdad en muchas ocasiones es fijar posición en contra de los que podrían ser los tuyos"

En un contexto marcado por la polarización y la crispación en el debate público español, el filósofo y periodista Diego Garrocho ha presentado en 'La Brújula' de Onda Cero su libro "Moderados", un ensayo que defiende la moderación como un acto de valentía y desafío intelectual frente a la cultura del insulto y la demonización

ondacero.es

Madrid |

Garrocho abordó en la entrevista cómo la moderación ha pasado de ser un ideal virtuoso a convertirse en objeto de burla y sospecha en la conversación pública, donde el insulto y la demonización se han normalizado. Frente a la cultura del zasca y la presión de las redes sociales, el autor sostiene que la valentía reside en desafiar a los propios y en no sucumbir al pensamiento gregario, aunque eso suponga decepcionar a todos.

La moderación: una herejía con costes personales y profesionales

Durante la conversación, Garrocho analizó cómo tanto la derecha como la izquierda penalizan a quienes no asumen sus programas de máximos, y cómo la moderación se ha convertido en una forma de herejía política. "Lo atrevido de verdad, lo valiente de verdad en muchas ocasiones es fijar posición en contra de los que podrían ser los tuyos", afirmó, subrayando la dignidad del disidente y la importancia de la duda como motor intelectual.

Redes sociales, periodismo y el desafío de la pluralidad

El autor criticó el papel de las redes sociales como cámaras de eco que refuerzan la radicalización y denunció la presión de los lectores para que los medios aceleren el discurso y se alineen ideológicamente. Garrocho defendió la pluralidad y la libertad intelectual en el periodismo: "Un periódico no es un artefacto para procurarnos placer o estímulo positivo, sino todo lo contrario, tiene que ser un artefacto de desafío intelectual".

Moderación no es equidistancia ni tibieza

Garrocho aclaró que la moderación no equivale a equidistancia ni a tolerar lo intolerable. Citando a Aristóteles, explicó que la moderación exige un ajuste preciso a las circunstancias, que puede requerir vehemencia o prudencia, pero nunca la renuncia a los principios.

"Moderaditos" es una llamada a recuperar la deliberación pública y la valentía de la duda en un contexto de polarización. Garrocho reconoce que el ciclo de crispación es difícil de revertir, pero insiste en que la moderación es el antídoto imprescindible para reconstruir una conversación democrática y plural.

Diego Barrocho: "Lo atrevido de verdad, lo valiente de verdad en muchas ocasiones es fijar posición en contra de los que podrían ser los tuyos"