Adriana es vecina y administradora de la finca del edificio de 14 plantas que se ha incendiado en Valencia. Reconoce que le han dado pastillas para tranquilizarse porque se ha quedado sin casa y "de milagro" su familia ha conseguido salir.
Cuenta que en el momento en el que ha comenzado el incendio ella no se encontraba en casa, estaba en su despacho, pero que en cuanto le han avisado ha acudido a la finca y a su llegada ya estaban los bomberos.
Afirma que el conserje y los vecinos han jugado un papel esencial avisando al resto para que salieran de sus casas.
La gran pregunta de Adriana es saber de qué material estaba hecho el edificio para que el fuego se propagara con tanta rapidez. Cuenta que en la finca no hay gas ya que utilizan la energía eléctrica.
La administración ha ofrecido al vecindario la posibilidad de pasar la noche en un hotel, pero que tendrán que ver cómo se organizan con esta situación.
