La dificultad de los jóvenes para acceder a una vivienda cada es mayor. En la sociedad española existe consenso sobre que este tema es uno de los principales problemas sociales.
Durante años la solución fue las VPO, las viviendas de protección oficial. De hecho, durante los primeros cinco años del Gobierno socialista de Felipe González, más de la mitad de las viviendas que se construyeron en nuestro país fueron VPO.
Sin embargo, en este siglo, la construcción de VPO nunca han llegado al 10%. En los nueve primeros meses de 2023 se levantaron tan solo 5.440 casas de protección oficial.
La solución al problema del acceso a la vivienda
El precio medio del metro cuadrado de una VPO sale a 1.165 euros en España, un 35% más bajo que el de una vivienda de segunda mano en el mercado libre. Esa diferencia, además, es más notable en las zonas más caras.
En provincias como Barcelona o Madrid, la vivienda protegida cuesta la mitad que la libre.
En definitiva, si los gobiernos central, autonómicos y locales quieren de verdad facilitar el acceso de los jóvenes a la vivienda, sea en propiedad o en alquiler, tienen que soltar suelo y recuperar la promoción pública. La solución empieza con el precio.