Se calcula que las hemorroides afectan hasta al 50% de la
población adulta, y entre el 5% y el 10% de quienes las
sufren requerirán algún tipo de intervención por padecer hemorroides
patológicas.
La patología hemorroidal tiene un gran impacto en
la vida diaria del paciente, produciendo molestias continuas, prurito,
sangrados frecuentes y en ocasiones intenso dolor, pero el miedo a la
cirugía convencional lleva a muchos pacientes a dilatar en el tiempo
la consulta con un cirujano para ser tratados correctamente, según Quirónsalud.
Por otra parte, el estreñimiento o las alteraciones del hábito
intestinal pueden intensificar los síntomas y confundir a los
pacientes entre las diferentes patologías anales (hemorroides, fisuras,
fístulas, ..), lo que sumado al rechazo a la cirugía, puede provocar retrasos
en el diagnóstico.
«El tratamiento quirúrgico de la patología hemorroidal es un procedimiento
que, en general, tanto en la conciencia como en la experiencia de los pacientes
es doloroso y tiene un postoperatorio prolongado y problemático», afirma
la Dra. Silvia Conde Someso, Jefa de Servicio de Cirugía General y
del Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud Valle del Henares.
«Sin embargo -señala-, en nuestro servicio hemos incorporado un nuevo
tratamiento con radiofrecuencia para la patología hemorroidal que elimina
prácticamente el dolor postoperatorio, sobre todo en comparación con la
hemorroidectomía convencional «.
La radiofrecuencia permite el tratamiento de las hemorroides,
principalmente grado II/III sin necesidad de resección quirúrgica ni
ligadura de las hemorroides, reduciendo así el dolor postoperatorio y las
complicaciones postquirúrgicas.