Imputan a un profesor por hablar por redes sociales con sus alumnos sobre drogas y sexo

Según ha informado el Instituto Armado, los hechos se remontan al mes de marzo cuando la Guardia Civil, dentro de los contactos habituales que se mantienen con los centros educativos, fue informada de que se habían presentado quejas en la dirección de uno de los centros, donde se hacía constar "la mala praxis de un profesor".

La denuncia recogida a través del centro, relatan las mismas fuentes, hacía referencia a que un docente, que ejercía sus funciones como sustituto en el centro educativo, "había creado un grupo de WhatsApp con sus alumnos, cuyo contenido constaba de imágenes y conversaciones en las que se hacía referencia y apología al consumo de sustancias estupefacientes, así como conversaciones de índole sexual", ha puntualizado la Benemérita.

En el marco de las investigaciones, la Guardia Civil tuvo acceso a las conversaciones mantenidas entre ese profesor y los alumnos, por lo que pudo comprobar "la veracidad de las mismas y la existencia del material audiovisual compartido", ha señalado el Instituto Armado.

"En algunos de los vídeos, el docente mostraba supuestos alumnos de otros centros en los que había ejercido, fumando sustancias psicotrópicas en su vivienda", han abundado las mismas fuentes.

Este comportamiento no solo se producía vía redes sociales, explica la Guardia Civil, sino que el profesor "durante las horas lectivas establecía conversaciones de índole sexual con los menores y llegaba a exponer la posibilidad de conseguirles bebidas alcohólicas y marihuana, como manifestaba hacer con sus anteriores alumnos", añade.

Centros de toda Galicia

Ante la "gravedad de los hechos investigados", la Guardia Civil solicitó la colaboración la Consellería de Educación de la Xunta de Galicia para tener acceso a los diferentes centros educativos en los que había impartido docencia.

Los investigadores mantuvieron contacto con todos estos centros educativos, "repartidos por las cuatro provincias gallegas", destaca la Benemérita, que añade que, "en todos ellos, su estancia había sido muy corta por diferentes bajas laborales".

Sin embargo, en un centro situado en la provincia de Lugo manifestaron que en su día alumnos habían expuesto al profesorado "incidencias similares", sostienen las mismas fuentes.

Bajas médicas

De igual forma que en el centro de A Costa da Morte, cuando la dirección del dentro abría una investigación, el docente se ausentaba alegando diferentes bajas médicas.

Por ello, "ante la similitud en su comportamiento", relata el Instituto Armado, "se indagó sobre el origen de las mencionadas bajas médicas" y se observó "incongruencias en varias de las mismas".

Tras contactos con los diferentes centros hospitalarios, alguno de ellos en Asturias, se llegó a comprobar la "falsedad de algunos de los justificantes", subrayan las mismas fuentes.

Una vez realizadas todas estas averiguaciones, el Puesto de la Guardia Civil de Vimianzo procedió a investigar al docente por delitos contra la salud pública y de falsedad documental.

Código penal

El Código Penal español califica como delito "el promover, favorecer o facilitar el consumo ilegal de drogas tóxicas", recuerdan las mismas fuentes, considerando agravante que estos hechos "sean realizados por un docente o educador en el ejercicio de su profesión".

La Guardia Civil destaca "la absoluta colaboración" de la Consellería de Educación, como de los diferentes centros educativos, que, ha sentenciado, "fueron fundamentales para el total esclarecimiento de lo acontecido".

Con todo, las investigaciones se mantienen abiertas ante la posibilidad de que pueda haber más menores de edad afectados.