Según datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social, el número de parados registrados en los Servicios Públicos de Empleo en la Comunidad de Madrid cayó en julio en 6.433 personas, un 1,40%, lo que deja la cifra total de desempleados en 454.661, mientras que en los últimos doce meses ha bajado en 51.317 personas, un 10,14% menos.
La secretaria de Empleo de CCOO de Madrid, Mari Cruz Elvira, ha asegurado que los datos "no son muy positivos" porque aunque el paro ha descendido se mantiene el "problema crónico" del desempleo que perjudica a las mujeres, que ya son más del 55 % de la población desempleada.
Además, ha dicho Elvira, "la bajada del desempleo no significa que se haya creado empleo, como lo demuestra que las afiliaciones a la seguridad social han disminuido en cerca de 11.500 personas y los contratos creados son claramente estacionales"
En su opinión, esto significa que "no hay empleo de calidad y hay cada vez empleo más precario", y que "mientras la recuperación se quiera hacer a partir de empleo precario y de bajos salarios, sin aumento de las prestaciones por desempleo, no habrá salida al desempleo, especialmente para mujeres y para jóvenes".
En UGT, su secretaria de relaciones laborales y formación, Isabel Vilabella, ha dicho que la bajada del paro es una "buena noticia acompañada de una mala por el crecimiento de la desigualdad que afecta a las mujeres".
Vilabella ha recordado que en Madrid hay 6.433 personas que han dejado el desempleo pero el paro ha aumentado en 726 mujeres, lo cual supone que "crece la desigualdad" y el descenso del paro es el doble entre hombres que entre mujeres.
Por otra parte, según la secretaria de relaciones laborales y formación de UGT, por segundo año consecutivo se registra una bajada anual del paro en julio, aunque baja el porcentaje de contratos indefinidos.
La afiliación a la Seguridad Social, ha dicho Vilabella, se ha incrementado en 100.000 personas en el ultimo año, pero "se debe a que se reparte el empleo entre más personas con contratos de menos duración", pues más de la mitad de los contratos tienen una duración menor de un mes y de estos siete de cada diez son inferiores a diez días.