Cuando tenía 15 años decidí que viviría hasta los 30. Mi vida gira en torno a la música y a la iglesia: el Violín y Dios. Del instituto al conservatorio, del conservatorio a los cultos, de los cultos a los ensayos y vuelta a empezar. Mis padres me notan raro. Me preguntan qué me pasa… Creo que me gustan los chicos”. Así comienza ‘Yo soy el que soy’, este espectáculo basado en la autobiografía de Aaron Lee, narrado en primera persona por Verónica Ronda, que está acompañada en el escenario por Gaby Goldman al piano y por el propio Lee, al violín.
El espectáculo, que dura 70 minutos, desborda emoción desde el impactante arranque hasta que suena la nota final. Nacido en Madrid, de raíces surcoreanas, Aaron se crio en el seno de una familia coreana tradicional y muy religiosa. Su madre era pianista y su padre, director de orquesta. Estudió violín desde los cuatro años hasta que tuvo que huir de su casa después de que sus padres se enterasen de que era homosexual. Fue maltratado, secuestrado por su padre en una isla, denigrado por su orientación sexual hasta que logró escaparse. Sobrevivió como pudo, llegando a tocar en la calle para poder comer y a sus 33 años se ha convertido en un prestigioso violinista.