Transparencia

La Consejería de Empresa también desobedece al Consejo de la Transparencia y se niega a facilitar las actas de inspección de las instalaciones radiactivas de Sabic en la Aljorra

El Consejo de la Transparencia insta a la consejería de Valle Miguelez a la incoación del expediente sancionador que corresponda por negarse a facilitar a Ecologistas en Acción las actas de inspección realizadas a Sabic desde 2017

Rosa Roda

Murcia | 02.12.2021 09:39

Instalaciones de Sabic en La Aljorra (Cartagena)
Instalaciones de Sabic en La Aljorra (Cartagena) | SABIC

El Consejo de la Transparencia resuelve que la resolución dictada por el Director General de Energía y Actividad Industrial de fecha 23 de agosto de 2021 dando acceso solamente a información parcial de las actas de inspección incumple expresamente la resolución aprobada por el Pleno del Consejo en su sesión celebrada el 6 de mayo de 2021 y advierte de que la citada Dirección General no puede revisar las resoluciones del Consejo de Transparencia.

El Consejo de Transparencia advierte en su resolución de que se trata de una infracción muy grave sancionada con multas que van desde los 30.000 a los 400.000 euros e insta a la Consejería de Empresa a depurar las responsabilidades disciplinarias en las que hayan podido incurrir sus autoridades, cargos públicos o empleados.

En agosto de 2021, la Dirección General de Energía y Actividad industrial facilitó las actas de inspección de las fuentes radiactivas de la planta LEXAN 2, en concreto la de la inspección de 2019, pero informó de que no podía facilitar las actas de las inspecciones realizadas a las fuentes radiactivas de alta actividad pertenecientes a las plantas LEXAN 1 y HPP en virtud del artículo 5 Del Real Decreto 1308/2011, de 26 de septiembre, y mencionó no obstante que “en ninguna de las actas aparece ninguna desviación o incumplimiento de la normativa”.

Desde Ecologistas en Acción recuerdan que en el complejo industrial de SABIC INNOVATIVE PLASTICS, en La Aljorra, en la planta denominada HPP destinadas al control del proceso industrial, se encuentran instalados 14 equipos con 31 fuentes radiactivas, de las que 6 son de alta actividad, de Cobalto-60 y que la última inspección del Consejo de Seguridad Nuclear, de la que tienen información, fue el 2/08/2017. Por otra parte, en la planta LEXAN 1 hay, según las actas de inspección, 20 fuentes radiactivas, tres de ellas de alta actividad (una de Cesio-137 y dos de Cobalto-60). La última inspección del Consejo de Seguridad Nuclear de la que tienen información también se realizó el 2 de agosto de 2017.

Y luego está la planta LEXAN 2 existen 17 fuentes radiactivas, ninguna de ella de alta actividad. La última inspección del Consejo de Seguridad Nuclear, de la que tienen información fue igualmente el 2 de agosto de 2017. Desconocen si hay más fuentes o equipos radiactivos en el resto de la empresa SABIC INNOVATIVE PLASTICS.

El CO-60 es una sustancia radiactiva con una vida media de 5,27 años y que se usa en tratamientos médicos contra el cáncer y en aplicaciones industriales, pero que es altamente tóxico para los seres humanos, según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), con sede en Viena. Para ese organismo, el 60-CO es, junto con el CS-137, la más efectiva fuente de radiación gama debido a su elevada energía y sus largos períodos de semi-desintegración.

En las actas aludidas, subrayan desde Ecologistas en Acción, se explicita que: el acta que se levante de este acto, así como los comentarios recogidos en la tramitación de la misma, tendrán la consideración de documentos públicos y podrán ser publicados de oficio, o a instancia de cualquier persona física o jurídica. “Lo que se notifica a los efectos de que el titular exprese qué información o documentación aportada durante la inspección podría no ser publicable por su carácter confidencial o restringido".

En ninguna de las 18 actas de inspección en la web del CSN4 se menciona que SABIC INNOVATIVE PLASTICS haya solicitado en su momento restricciones de confidencialidad sobre algún aspecto relativo a las inspecciones. Entienden por tanto en Ecologistas en Acción, y así lo denunciaron ante el Consejo de Transparencia, que no cabe, por tanto, alegar alguna restricción al derecho de información pública de estas actas de inspección; restricciones que se recogen en la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común, en el Real Decreto 1308/2011, de 26 de septiembre, sobre protección física de las instalaciones y los materiales nucleares, y de las fuentes radiactivas y en la Ley 19/2013, de 9 de diciembre, de transparencia, acceso a la información pública y buen gobierno.

Razones de "seguridad de Estado"

En abril de 2020, el Consejo de Seguridad Nuclear confirmó al diario.es que se habían realizado nuevas inspecciones el 25 de julio de 2018. Sin embargo, el acta de esa inspección no está publicada en la página web del Centro de Documentación del CSN a diferencia de las anteriores.

Según informó el citado diario digital el retraso se produjo, según el Área de Comunicación del Consejo de Seguridad Nuclear dependiente del Ministerio de Industria , “por una razón interna y personal tan sencilla como que la persona que las llevaba a cabo estuvo de baja. Estamos al corriente del desfase pero ya estamos trabajando para ponernos al día lo antes”. Las actas de inspección siguen sin publicarse y la Dirección General de Industria de la CARM se niega a facilitarlas a Ecologistas en Acción pese a los requerimientos del Consejo de Transparencia.

Con motivo de la parada técnica programada que la empresa realizó en junio de 2020, se pidieron las actas de inspección, pero tanto el Consejo de Seguridad Nuclear como la Dirección General de Industria de la Consejería de Empresa se negaron a facilitar las últimas actas de inspección de esas instalaciones arguyendo razones de "Seguridad del Estado”.

El complejo de La Aljorra empezó a operar en septiembre de 1994, tras acabar su construcción para General Electric Plastics (GEP), división del holding estadounidense General Electric. Este la vendió a Sabic en mayo de 2007. Después, ARAMCO, la petrolera estatal de Arabia Saudí se hizo con el 70% de Sabic en mayo de 2019 por unos 61.346 millones de euros.