La consellera de Agricultura, Mireia Mollà, ha puesto de relieve "que debemos poner en marcha esta instalación lo antes posible para abrir una nueva ventana de oportunidad en los ayuntamientos de La Vega Baja con el objetivo de que puedan optar con garantías a las máximas cantidades posibles de los nuevos fondos de reconstrucción de la UE que ya tenemos y que van a venir en los próximos ejercicios a la Comunitat Valenciana, para la mejora de la gestión de residuos domésticos, según los nuevos parámetros de la Economía Circular marcados por la UE."
Por su parte, el director general de Calidad y Educación Ambiental, Joan Piqer, ha señalado que la instalación será "fundamental para la mejora de las recogidas separadas de calidad en origen en los municipios del consorcio".
Asimismo, ha expresado que el objetivo es "ayudar a los ayuntamientos a poner en marcha nuevos servicios de recogida separada de alta eficiencia, como la recogida separada puerta a puerta de biorresiduos, o el incremento de las recogidas selectivas de envases", entre otros.
La instalación dispondrá de tres tolvas de descarga separadas, de modo que, a criterio del consorcio y de los entes consorciados, podrá recibir de manera separada varias fracciones de residuos. Asimismo, también se dispondrá de un equipo compactador para residuos voluminosos.
A parte de la inversión de la obra de la planta de transferencia de Dolores, se prevé que la aplicación presupuestaria 2021 de la Generalitat pueda servir para desarrollar otras obras en el consorcio, como la mejora y construcción de algunos ecoparques fijos en La Vega Baja, cuestión que está pendiente de concretar por el Consorcio.