Si a comienzos de la temporada e incluso al terminar la primera liguilla en el sorteo de los emparejamientos ya del KO nos hubieran pedido algunos favoritos hubiéramos dado evidentemente al Liverpool al Manchester city e incluso al PSG y el Bayer de Munich por delante del mismísimo Real Madrid.
Sin embargo los blancos han ido eliminando uno tras otro a tres de los grandes aspirantes, con fuertes emociones en todos los partidos, y demostrando que nunca se quiebra y no se da por perdido hasta el silbatazo final.
Esa es la lección que tenemos que aprender de lo que hemos vivido hasta ahora, el Madrid en teoría sería inferior al Liverpool pero lo equilibra todo con el plus de competir en un torneo que para ellos es muy pero que, muy especial y en el que han tenido un rendimiento muy por encima de lo habitual.
No sabemos cómo llegará físicamente el Liverpool muy tocado en las últimas semanas y con algunos futbolistas llegando casi casi al límite.
Tampoco sabemos cómo reaccionará el Real Madrid después de haber bajado la tensión durante dos semanas para reactivarse solo de cara a la final. Todos estos factores no hacen más que añadir más incertidumbre al desenlace del partido.
No me atrevería a dar un pronóstico claro de favoritismo y máxime viendo los antecedentes en las últimas finales del Real Madrid y frente al propio Liverpool en la que una desacertada actuación de su portero Karius le costó el torneo en Ucrania.
Ahora es un Liverpool más fuerte, con jugadores muy determinantes y que con Klopp en el banquillo alcanzado una línea de regularidad que le permite concebir opciones de eliminar al Real Madrid en el partido.
El Madrid estará en manos de dos hombres muy importantes el portero Courtois y Karim Benzema el hombre más determinante en este torneo en el que ha hecho la friolera de 15 goles.
Si el francés está al nivel que ha demostrado en la rondas eliminatorias, el Madrid tendrá mucha chance y opciones de ganar porque ha demostrado ser un auténtico animal competitivo.
También el Liverpool nos mostró la cara de la de la duda en la primera parte frente al Villarreal en el estadio de la cerámica, en la que estuvo a merced del equipo de Unai Emery e incluso al borde del caos.
Esa flojedad ante el submarino amarillo hace ver que no es un equipo intocable y por tanto que tiene sus puntos vulnerables que puede encontrar el Real Madrid.
Será una final apasionante sin duda de un gran nivel si ambos equipos están a su altura podemos disfrutar de un grandísimo espectáculo como lo que siempre es la liga de campeones.