Mañana arranca una nueva edición de la siempre apasionante Liga de Campeones. Una Champions muy diferente, distinta y posiblemente muy difícil para el Barcelona. La primera en los últimos dieciocho años sin Leo Messi y por eso entre otras cosas posiblemente la primera sin favoritismo para el Barcelona.
En los últimos tiempos el Barcelona ha ido perdiendo potencial, ha ido perdiendo el respeto y el temor de los rivales hasta convertirse en uno de los equipos llamados alternativa o outsiders pero ya no claro favorito como antaño.
Los fuertes clubes ingleses como el Chelsea y el Manchester City, el todopoderoso y millonario PSG y por supuesto siempre el bayern de Munich e incluso algunos dirán que el Real Madrid están en esa carrera por delante. Para mi los blancos están en una situación muy cercana al Barcelona, su potencial es similar al de los blaugranas pero no tienen que reestructurar todo su estilo de juego o recomponer su figura sin la importantísima presencia de Leo Messi.
Pero ya se sabe que esta es una competición traicionera y que un mal día te puede dejar fuera de la lucha final. Hay poco margen de error como se demostró el año pasado cuando el Barcelona que tenía muy encarrilado el primer puesto de la liguilla se dejó remontar en el Camp Nou ante la Juventus y se vio obligado tras caer en el bombo dos a enfrentarse con el PSG con el desenlace de todos conocidos.
Ahora será más duro y difícil, de hecho el Barça comenzará contra el gran hueso de su grupo, el conjunto bávaro del Bayern de Munich para empezar a calibrar cuanto de lejos está de los grandes equipos europeos aspirantes al cetro continental. Y además sin buen aparte de su arsenal ofensivo. Ansu, Dembelé, Braithwaite y Aguero, casi nada.
Muy pronto le llega al Barcelona este test, es una prueba de fuego demasiado exigente para un equipo en recomposición, pero es lo que hay. Habrá que tener paciencia y asumir el nuevo papel que tiene que asumir el Barcelona en el fútbol moderno y en la Champions en concreto.
A pesar de todo es el BarcelonA y tiene jugadores con el potencial y la calidad suficiente como para no dar por antemano por perdido ningún choque. El resto debe empezar a hacerlo el público que poco a poco va a ir dándole calor al estadi.
Mañana será distinto, será muy duro pero hay que tratar de volver a disfrutar en Europa y tratar de imponer el estilo que hizo famoso y admirado al Barcelona durante mucho tiempo. Una ventaja tienen. No hay urgencias y además debe haber paciencia.
