Ambas líneas de apoyo forman parte del Plan de Choque promovido por la institución provincial para hacer frente a las consecuencias sociales y económicas del COVID-19.
La cuantía máxima de la ayuda por autónomo o empresa será del 60% de los gastos subvencionables sin incluir el IVA, con un límite de 600 euros, lo que supone un apoyo directo a al menos 3.500 autónomos o pequeñas empresas localizados en municipios de menos de 20.000 habitantes.
Para optar a las ayudas, cuyos requisitos están publicados en el Boletín Oficial de la Provincia, los autónomos deberán estar empadronados o tener su centro de trabajo en un municipio de menos de 20.000 habitantes, y estar dados de alta en el RETA o en la mutualidad de Colegio profesional desde antes del 1 de enero y mantener el alta durante el Estado de Alarma. En el caso de las pymes, éstas deben haberse constituido también antes del 1 de enero de este año, tener su centro productivo o de trabajo en un municipio de menos de 20.000 habitantes, tener menos de 20 trabajadores y un volumen de negocio anual que no supere los 2 millones de euros.