Sevilla será la primera ciudad de Andalucía que limitará las viviendas de uso turístico tras la aprobación y publicación del decreto de la Junta de Andalucía y su entrada en vigor el 5 de marzo.
Esta propuesta tiene como objetivo poner de manifiesto cómo existe una correlación entre la presencia de viviendas de uso turístico en los distintos barrios y el deterioro de las condiciones de vida en algunos de ellos, lo que lleva a la conclusión de la necesidad de establecer límites a la cantidad de viviendas de esta categoría.
La Gerencia de Urbanismo ha elaborado un informe con conclusiones, entre ellas, que este tipo de viviendas suponen más del 50% de las plazas de alojamiento turístico ofertadas y se concentran en 14 barrios, que tienen una rentabilidad económica sensiblemente superior que el alquiler convencional, que los barrios con mayor presión turística residencial pierden mayor número de personas y crecen en menor número de hogares o que los precios del alquiler son más altos en los barrios que soportan una mayor presencia de estas viviendas.
El parámetro que se concreta para determinar el número de viviendas máximas permitidas por zonas es que las viviendas de uso turístico registradas no superen el 10% del total de viviendas familiares.
Tres zonas diferenciadas
- Zona 1. Se apuesta por un decrecimiento de las viviendas turísticas puesto que la tasa de inscripción de estos inmuebles es superior al 10% del total de viviendas familiares. En esta zona se engloban 11 barrios del Casco Antiguo (Santa Cruz, Arenal, Alfalfa, San Bartolomé, Feria, Encarnación-Regina, Santa Catalina, San Lorenzo, San Gil y, San Vicente) y el barrio de Triana Casco Antiguo.
- Zona 2. Aquí podría haber un crecimiento de los alojamientos controlado o acotado, dado que la tasa de inscripción de estos inmuebles es inferior al 10% del total de viviendas familiares disponibles. A este sector corresponderían los barrios de San Julián, El Museo y San Bernardo.
- Zona 3. Donde se admitiría un crecimiento de dichas VUT, dado que la tasa de inscripción de estos inmuebles es inferior al 5% del total de viviendas familiares disponibles. Se encontrarían en este apartado los restantes 94 barrios de la ciudad pertenecientes al resto de distritos municipales con menor presencia turística.
Sólo en aquellos barrios donde no se haya agotado el número máximo de viviendas de uso turístico establecidas de acuerdo a este parámetro, podrán otorgarse nuevas autorizaciones hasta alcanzar ese máximo del 10%.
Por el contrario, en aquellos barrios donde se haya llegado al límite establecido o haya sido sobrepasado, no se otorgará ninguna autorización nueva para esta modalidad de alojamiento turístico.
Este miércoles, el Consejo de Gobierno de la Gerencia de Urbanismo tiene previsto aprobar la remisión de esta propuesta al Pleno del 21 de marzo para que se apruebe de forma inicial.
Tras su aprobación inicial se abrirá un periodo de exposición pública por un plazo de veinte días. Por lo que el ayuntamiento confía que en abril esta propuesta esté aprobada definitivamente.
