Igual sí va a ser por las malas directamente. O casi.
Con el bando municipal de Marbella era “por las regulares” porque las prohibiciones del agua no tocaban el consumo en los domicilios y se mantenía el nivel de la llamada a la concienciación.
Pero un día después, ayer, conocíamos que Acosol se pone ya serio del todo. La empresa del agua ahorra el famoso 20% en el origen. O sea, que suministra un 20% menos de agua a los municipios, de modo que ahora es más sencillo que antes; y más claro: o en las casas ahorramos agua o llegará un momento en que no llegue. Tan fácil como eso.
Y sí, mientras tanto, que si unos pozos que se construyeron hace 30 años y estaban en desuso por cuestiones de salubridad, y que si los acuíferos pueden conservar más agua de la que se pensaba y aprovecharla antes de que se vaya hacia el mar. Que sí, que todo eso está muy bien.
Pero, por quinta o sexta vez ya en apenas dos meses: que depende de ustedes, de nosotros. Y no hay más. Y seguirá siendo así, aunque diluvie. Sigamos acordándonos de Santa Bárbara, aunque empiece a tronar.
No parece tan difícil.