El Barça dominó sin problemas al Inter Miami de la liga MLS norteamericana, en el primer partido de la gira estadounidense del equipo catalán y en en el que jugaron tres de las nueva adquisiciones de los blaugranas: Franck Kessie, Andreas Christensen, Raphael Días Belloli "Raphinha".
La cuarta incorporación al equipo barcelonés, el polaco Robert Lewandowski, presenció el partido desde la grada acompañado por Gerard Piqué y Ferrán Torres.
La transferencia del polaco del Bayern de Munich al Barcelona se oficializó dos horas antes del inicio del amistoso con el Inter Miami por lo que el delantero no pudo participar en el partido. Lewandowski será presentado el miércoles oficialmente en Miami y se espera que juegue en el amistoso que el sábado disputarán en Las Vegas (EE.UU.) el Barcelona y el Real Madrid.
El Barça se mostró en control absoluto del partido durante los 90 minutos disputados en el estadio DRV PNK de Fort Lauderdale, que tuvo su primer lleno absoluto de la historia con entradas que alcanzaron cerca de los 2.000 dólares en la reventa.
Los blaugranas tuvieron un 66 % de posesión del balón, ejecutaron 23 tiros a puerta, por 1 del Inter Miami, de los que 8 fueron entre los palos de la portería estadounidense. Además, el equipo barcelonés dispuso de cinco tiros de esquina, por uno de los locales.
En la primera mitad, Óscar Hernández, hermano del entrenador del Barça, Xavi Hernández, que no pudo viajar a Estados Unidos con su equipo por problemas con su pasaporte, colocó sobre el terreno de juego a Kessie, Christensen y Raphinha.
Desde el inicio, la sinergia entre el marfileño Kessi y Pedri funcionó, provocando varias situaciones de peligro en el área del Inter Miami. Si las combinaciones entre Kessi y Pedri volvían locos a la línea defensiva del Inter, la rapidez de Raphinha y Ansu Fati añadían más dolores de cabeza a los locales.
En la retaguardia, el danés Christensen, recién llegado del Chelsea, se mostró sólido en su puesto de central.
La primera oportunidad del Barcelona se produjo antes de que se cumpliesen los dos minutos iniciales del partido de los pies de Kessi, que había recibido un ajustado pase de Pedri. Pero el marfileño lanzó el balón a las manos del portero de Miami, el neerlandés Nick Marsman.
Durante los 10 primeros minutos, las oportunidades del Barça se sucedían con rapidez gracias a Kessi, Ansu Fati y Eric García mientras que el Inter de Miami permanecía encerrado en su campo.
En el minuto 19, una combinación entre Pedri, Raphinha y Pierre-Emerick Aubameyang culminó con el gabonés colocando en el marcador el primer gol del Barça.
Aubameyang abrió el portón para la goleada. Seis minutos después, Raphinha marcó su primer gol como azulgrana con un tiro con la zurda que Marsman sólo pudo rozar.
Y poco antes del descanso, una rápida combinación a un toque entre Nico, Aubameyang, Raphinha y Ansu Fati terminó con un tiro del de Guinea Bissau ante el que Marsman no pudo hacer nada.
Otro 11 para la segunda parte
Al descanso, Óscar Hernández cambió el 11 inicial para dar entrada a Iñaki Peña, Araujo, De Jong, Busquets, Alba, Dembéle, Gavi, Roberto, Pablo Torre, Ez Abade y Memphis.
Los cambios en uno y otro equipo no modificaron la dinámica del partido. Los de Miami seguían siendo incapaces de salir de su mitad con peligro y el Barcelona castigaba sin cesar, esta vez a través de Memphis, Dembéle y Gavi, la portería local. Este último fue el primero en anotar tras la reanudación al recoger, en el minuto 55 un saque de esquina a la altura del punto de penalti y rematar con contundencia a la escuadra.
Con un 0-4 en el marcador y catorce minutos después, la presión de Memphis logró su fruto con un golazo del delantero en el que demostró su clase.
El neerlandés recibió a la altura del punto de penalti un balón procedente de la banda izquierda, pisó el balón y ejecutó un reverso que dejó tirado a su defensor para encararse ante el portero. Memphis no falló con un tiro ajustado al poste.
Con 0-5, el Barça no aflojó. Una individualidad de Dembéle subió el sexto definitivo. El francés cogió el balón en el medio del campo, corrió perseguido por los jugadores del Miami, se plantó en el borde del área grande de los locales y desde allí ejecutó un tiro raso que se coló por el lado derecho de la portería.