Borja Fernández ha publicado un vídeo en el que estalla contra los jueces que no han visto delito en el hecho de que los agentes de la UDEF entraran en su casa y lo detuvieran tres días sin una orden judicial por su supuesta implicación, que después se demostró que no existía, en una trama de compra de partidos conocida como la operación Oikos.
"Llevo tiempo esperando el momento para poder hacerlo. Y coincidió ayer que justo me cambié de casa. Fue la casa en la que me detuvieron y último día en el que podía hacerlo", dice Borja sobre su vídeo en Radioestadio noche. En todo momento muestra su gran enfado: "Empiezo duro porque también quería llamar la atención y si empiezas con un tono muy suave y con buena cara como pongo siempre, a lo mejor estás haciendo el friki y que queda un vídeo más".
"Tú no puedes entrar en la casa de una persona así, si no se cumplen 333 premisas y ninguna se cumplía. Fue un atropello y no fueron profesionales y fueron a lo suyo y no les importó llevar a quien sea por delante", explica y detalla el por qué no podían entrar a registrar su casa: "El juez no firmo la orden, con lo cual no podían haber entrado, pues todo lo que ocurrió y ya es que no hay ninguna prueba, que no hay ningún indicio, que no investigaron bien y pues te calientas".
De todas las circunstancias, esa es la más grave: "Entraron en mi casa así, sin orden judicial, que no podían haber entrado. Esa es la básica y la más importante y la que abogados y policías no entienden como no ha seguido para adelante porque saben que eso es una cosa básica".
Una situación que le vino después de que los investigadores vieran una reunión con Raúl Bravo: "Creo que una persona que conozco desde los 15 años, con la que he vivido muchas cosas cuando éramos pequeños en la cantera de Madrid, subimos al primer equipo juntos y me dice que está en la ciudad en la que yo vivo y si tomo un café. Pues claro, es que no he hecho nada malo".