SOSPECHOSO DE POR FIN

Sabino Méndez: "Todo lo que sucede es debido a detalles"

Nuestro 'sospechoso' de domingo reflexiona sobre la transcendencia que está teniendo el suceso ocurrido en la valla de Melilla y la importancia de los detalles en lo moral.

ondacero.es

Madrid | 04.12.2022 11:45

¿Puede medirse una cuestión moral? Siempre nos han contado que existe una fina línea entre el bien y el mal, entre el amor y el odio. Pero si todos siempre hemos querido un mundo sin fronteras, por ejemplo, ¿qué estamos haciendo ahora la discutir sobre las víctimas de la valla de Melilla? Centrándonos en líneas administrativas o catastrales, ¿no será más bien que no sabemos enfocar el tema? Probablemente, divididos entre la buena voluntad y el miedo al no saber qué hacer, la reacción instintiva es desviar la mirada y mirar a otro lado para no tener que enfrentarnos a eso de qué hacemos, cómo lo hacemos o de qué manera lo resolvemos.

Durante esta semana, se ha podido contemplar los frívolos debates sobre los fallecidos en la valla de Melilla, un hecho que nos hace cuestionarnos muchos detalles como si marcaría el final de nuestras vidas alegar que esas personas murieron veinte metros hacia un lado o hacia otro, dónde están los límites exactos de Europa o lo "macabro" que es el hecho de decir a una personas que ha muerto a escasos centímetros de entrar en su objetivo.

Ante esta situación, Sabino Méndez explica la cuantía de la moralidad, algo inmensurable aunque sabemos distinguir entre quienes tienen más o menos. También expone que "para los problemas morales de la vida humana, no nos van a servir las soluciones de catálogo, las generalizaciones humanizadas", lo único que se necesita son los detalles en esa situación.

Para explicar esta afirmación, propone un ejercicio de imaginación, pensando que tenemos a uno de los migrantes muertos al lado, salvo que esta vez estuviera vivo ¿Cómo reaccionaría al ver las discusiones sobre dónde murió exactamente?¿Resolvería su situación? Es probable que se quedase impactado ante esto porque él tendría en cuenta los detalles como el exceso de personas demográficamente hablando, la pobreza en su zona, las prósperas comunicaciones europeas o la explotación y dominación que sufren.

No hay una manera concreta para medir la moralidad, algo que ocurre igual con la sensibilidad o la caridad. Cada uno cuantifica esto influidos por él mismo, no todos sienten y padecen lo mismo. Solo hay algo claro, los detalles. "Todo lo que sucede es debido

a detalles, si los ignoramos caemos en la vanidad, en las generalizaciones, en los estereotipos, en las ideas", concluye Sabino.