Estaban ambos explicando la postura del partido sobre el derecho a decidir y el referéndum que pretende realizar Artur Mas --Navarro a favor del referéndum para votar “no” y Chaves a favor de reformar primero la Constitución y luego ya veremos si se hace, o no, una consulta-- cuando pidió la palabra el veterano Corcuera, ministro del Interior que impulsó la ley de la patada en la puerta y que se fue a su casa cuando el Constitucional le modificó lanorma.
Fiel a su imagen, a lo mejor injusta, de hombre siempre enfadado, se dirigió Corcuera a los dos ponentes para decirles, con cierto tono de desdén,“¿eso del derecho a decidir qué es?; ¿y esto del Estado federal que propone el PSOE?, esto no es más que una palabra inventada para salir de un atolladero que nosotros no hemos creado”. En la cara de Chaves y de Navarro se percibió una cierta incomodidad. El líder del PSC ha debido de tratar poco al ex ministro, Chaves le tiene un poco más trabajado y es probable que se haya sorprendido menos.
A Corcuera dejó de gustarle la deriva de su partido sobre el modelo territorial a poco de llegar Rodríguez Zapatero, en eso siempre ha estado en sintonía con Rodríguez Ibarra, compañero de fatigas en la denuncia de los nacionalismos y compañero también a la hora de defender a Rafael Vera en dar estopa alos jueces que osaban investigar el terrorismo de Estado. Ahora que Ibarra, en su papel de pensador, compara el derecho a decidir con la ascensión de Hitler al poder (ataque al sistema desde dentro del sistema), Corcuera se apunta a la tesis y pregunta cómo se le puede llamar demócrata al presidente autonómico quepretende convocar una consulta que la Constitución no contempla.
En el PSOE quitan importancia a las opiniones de sus dos veteranos. En privado dicen que juntas a Corcuera con Ibarra y te salen Statler y Waldorf, es decir, los abuelos del palco de los teleñecos, siempre tan críticos con lo que hagan los nuevos. Pero es verdad que el partido que hoy lidera Rubalcaba no termina de resolver su propio debate interno sobre el modelo territorial y el independentismo crecienteen Cataluña.
Gracias a la intervención de Corcuera se escuchó a Manuel Chaves acuñar esta mañana el concepto de estado cuasifederal: España no es ni federal ni confederal, es cuasifederal. Entiéndase, con una descentralización autonómica muy acusada que el ex vicepresidente entiende que se puede aumentar aún más. La dirección socialista se agarra a la reforma de la Constitución y el modelo federal para tener una posición propia, diferente de la del PP y de la Artur Mas y Esquerra.
Pero sabe que en las reclamaciones actuales de estos no figura ni federalismo ni reforma consticional: lo único que desean, o eso dicen, es un referéndum que abra camino a la declaración de independencia. Independientes, pero en la Unión Europea. Hoy dijo Artur Mas: “Cataluña hará lo que sea para seguir en la Unión Europea”. Que hay quien dijo: cuidado, a ver si está otra vez el pope autonómico flojeando, a ver si es que está dispuesto a quedarse en España para poder seguir siendo europeo.
Como tiene antecedentes de flojera de ánimoArtur Mas, los de Esquerra escuchan estas cosas y se preocupan: téngase en cuenta que, pese a tanta declaración y tanta puesta en escena, la consulta ni tiene aún texto ni tiene fecha. Tranquil, Oriol (Junqueras) porque lo que quiere decir Mas es que Cataluña hará lo que sea para seguir en la UE menos...renunciar a la independencia, es decir, que hará todolo posible para seguir en la UE menos ¡seguir en la Unión Europea! Dices: ¿qué es esto, un trabalenguas? No, es el pensamiento político del president.
Que se esfuerza en mantener vivo, como si hubiera división de opiniones, un debate que, en realidad, nunca ha existido. De siempre ha explicado lo mismo la Unión Europea, porque es de cajón: un estado nuevo que se desgaja de otro que ya existía es, como su condición indica, un estado nuevo (aquí la palabra clave, atención,es “nuevo”), luego si es nuevo no pertenece a ninguna organización hasta queno ingrese en ella.
Tiene sentido, ¿verdad? El recién nacido habrá de pedir suingreso en la ONU, en el FMI, en la OTAN (si desea formar parte de la Alianza) y en la UE, si aspira a ser estado europeo. Esto lo entiende hasta un niño, sea o no sea independentista. Nunca ha habido debate al respecto, lo que pasa es que el gobierno catalán, Esquerra y algunos líderes de opinión que hablan de oídas le pusieron un piso a Viviane Reding y luego intentaron ponerle otro a Almunia por haber hecho suyo el nunca digas nunca jamás, es decir, que en el futuro, y una vez que la hipotética Cataluña independiente solicitara el ingreso en la UE, habría que ver qué decían los países miembros, que son los que deciden quién cabe y quién no cabe en su club, como bien saben los turcos.
A Viviane Reding le cogieron el rábano por las hojas y a Almunia le amputaron la reflexión por la mitad para hacer creer al respetable público, los votantes de Convergencia y Esquerra, los oyentes y espectadores de cadenas públicas, que no estaba nada claro esto de que un estado nuevo no forme parte del club al que pertenece el estado del que se segregó.
En el colmo del despropósito argumental, el profesor Junqueras --hombre fuerte de Esquerra y, hoy por hoy, de la política catalana,líder en las encuestas-- presentó hoy el siguiente precedente para argumentar en favor de su tesis, la de que Cataluña seguiría siendo Union Europea aunque se independizara: el precedente es ¡Alemania!, la reunificación alemana.
Dice Junqueras: Cuando la Alemania del Este se integró en la Alemania Occidental pasó a ser miembro de la UE automáticamente. Sin más debate. Olé por el ojo clínico a la hora de escoger precedentes. La palabra clave, esta vez, es “reunificación”. Obsérvese que es un caso ligeramente distinto, ¿verdad?, a una segregación. La Alemania del Este se integró en una nación, Alemania, que ya era UE. Y, en efecto, al pasar a formar parte de una nación que ya era Europa, se convirtió en Europa.
Salvo que Junqueras esté pensando en sacar Cataluña de España para proceder luego a una reunificación (que cualquiera sabe) todo indica que el caso que ha elegido para sostener su tesis es justo el contrario del que él está planteando: un territorio que está dentro de una nación europea decide quedarse fuera. Ahí no hay integración europea automática posible. Esto también lo sabe cualquiera de los niños que sacan en la televisión pública (y cada vez más oficial) de Cataluña.
Paréntesis: hacer un reportaje de niños de doce años que anhelan la independencia tal vez tenga algún interés informativo, pero ¡ay lo que habría dicho el gobierno catalán si hubiera sido la televisión pública esta talla que emitiera un programa de niños en el que todos dijeran que independizarse es un absurdo. Y por cierto, La Vanguardia ha enlazado esta mañana el vídeo en su web, pero no un enlace con TV3, sino con youtube, y ahí aparece el titulillo que quien lo haya subido le ha puesto a la pieza: “Niños independentistas educados en el odio a España”. Ver en La Vanguardia esta interpretación de la pieza televisiva como si el periódico la hiciera suya --niños educados en el odio a España-- habrá dejado al conde de Godó turulato.