Un 17 de diciembre de 1975, cuenta PK a "India Today", Charlotte, una joven noble sueca, apareció en ese lugar con un grupo de amigas. Habían viajado de Suecia a Delhi cruzando Europa, Turquía, Irán, Afganistán y Pakistán. Cuando Charlotte le pidió a PK que le hiciera un retrato, su conexión fue inmediata.
Él descubrió pronto que tenía todos los requisitos de los que le había hablado su madre, y enamorados, se casaron según la tradición tribal del novio. Charlotte tenía que continuar el viaje, se despidieron pero le hizo prometer a PK que se reencontrarían en Boras, la cuidad en Suecia donde ella vivía. Estuvieron más de un año comunicándose por carta. Él no tenía dinero para pagarse un billete de avión, decidió vender todas sus cosas, se compró una bicicleta, y decidió ir a buscarla. Cada día pedaleaba 70 kilómetros. A cambio de retratos recibía dinero, alojamiento o comida. Cuatro meses después de iniciar su aventura, por fin llegó a Europa. Atravesó Estambul y Viena, y puso rumbo a Gotemburgo en tren. En Suecia se volvieron a casar pese a las reticencias de los padres de Charlotte.
PK tiene 64 años, vive con Charlotte y sus dos hijos en Suecia y sigue trabajando como artista. Ambos trabajan para dar becas culturales a los miembros de la casta a la que perteneció él en India.Su amor sigue intacto.
"Estamos casados física y espiritualmente y éste último nivel nunca podrá separarse", asegura Charlotte a la BBC. Su historia está contada en un libro y podría convertirse en película.