JULIA EN LA ONDA

Diferencias entre hipoteca inversa y nuda propiedad: ventajas y desventajas para los jubilados

Los economistas Gonzalo Bernardos y Javier Díaz-Giménez explican en 'Julia en la onda' las diferencias entre las hipotecas inversas y la nuda propiedad y cuál de ellas es la mejor opción para los jubilados.

ondacero.es

Madrid | 12.09.2023 18:41

Los datos de las hipotecas y compraventa de viviendas publicados por el INE apuntan a una bajada en la firma de hipotecas con un interés medio a su mayor nivel desde 2017.

El profesor Gonzalo Bernardos cree que los datos del INE son "galácticos" y "no se corresponde nada con lo que ocurre en el mercado". "Caen las transacciones y las hipotecas, pero el precio resiste".

Bernardos considera que esta contradicción se debe a que las estadísticas no están bien hechas. "Las transacciones que notifican los notarios son 717.000 el año pasado pero el INE solo ve 649.000. En lugar de coger las de los notarios, cogen la de los registradores. Hay 67.000 compraventas que el año pasado no pasaron por ellos", explica.

Por su parte, Javier Díaz coincide en que "con el euribor donde está, los datos del INE parecen inconsistentes. Se esperaría una bajada más pronunciada del precio que no se está manifestando".

"Ante una bajada tan brutal de las hipotecas, ¿cómo puede subir el precio de las viviendas?", se pregunta el profesor Bernardos. "Cuando lo que determina el precio de la vivienda es negativo y lo que te sale es un precio al alza, lo que está mal es el dato", sentencia el economista.

Hipoteca inversa vs nuda propiedad: ¿Cuál es mejor?

Una de las opciones que tienen los pensionistas, sobre todo aquellos que tienen pensiones bajas, es sacar rentabilidad a su inmueble con las hipotecas inversas, una herramienta que algunas aseguradoras han recuperado en estos últimos años.

Pero, ¿en qué consiste una hipoteca inversa? Este producto está dirigido a personas mayores de 65 años. El propietario recibe una cuota mensual, que dependerá de su edad y del valor de la vivienda (cuánto más altos sean estos dos factores, mayor será también la cuota) a cambio de que siga utilizando la vivienda. Es decir, la persona no deja de ser propietaria de la vivienda.

¿Y qué gana el banco? Cuando el propietario fallece, el capital prestado por el banco (más intereses) tiene que ser devuelto a la entidad y serán sus herederos quienes elijan cómo saldar esa deuda.

Para Bernardos, esta no es una buena opción. "Una hipoteca inversa de un piso valorado en 300.000 euros, como mucho te van a dar 150.000. Y si ese dinero te lo dan a los 65 años, igual a los 80 ya no te queda nada", señala.

"Un sistema mejor es la diferenciación entre el usufructo y la nuda propiedad. Vendes el piso pero no te pueden echar jamás. El propietario tiene el usufructo y el que ha comprado la vivienda tiene la nuda propiedad, pero no puede entrar en la vivienda sin el permiso del usufructuario", explica. ¿El inconveniente? Que el propietario tiene que tener más de 80 años para que le den un buen precio por la propiedad.

Javier explica que la hipoteca inversa "es un componente de una familia de productos financieros que lo que pretende es darle liquidez al patrimonio inmobiliario". "Se puede organizar de muchas formas, que se especifican en un contrato", añade.

"Cada vez vamos a ver más productos que van a permitir a los propietarios de viviendas complementar sus pensiones a cambio de perder una parte de su capital inmobiliario", asegura Javier.

Pero las hipotecas inversas no son tan buen producto para los bancos, ya que los hijos "no lo quieren los hijos porque no heredan" y, tal y como apunta el profesor Bernardos, "en España más del 70% de la riqueza es heredada".