La muerte por un fallo cardíaco en su cama, a los casi 80 años, en plena forma y habiendo tomado decisiones hasta horas antes, le ha alcanzado tras haber colocado al Santander en el número uno de la zona Euro y en la sexta posición del ranking mundial.
De su gestión como banquero, maestro tanto de la táctica como de la estrategia, hablaremos en el tiempo de gabinete. Añadamos que se da por hecho que la sucesora en la presidencia del banco será su hija Ana Patricia. A esta hora la comisión de nombramientos, según prevén los estatutos del Santander, estará ya a punto de proponer al Consejo, el nombre de la hija primogénita para ocupar la presidencia.
Hace 25 años que el patriarca venía preparando la sucesión en su hija, señalada hace tiempo ya como una de las mujeres más poderosas del Reino Unido. Allí estaba hasta esta mañana como consejera delegada de la filial en la City. Y un último apunte. ¿Se dan cuenta que en apenas unos meses estamos asistiendo a un cambio generacional espectacular en puntos estratégicos? En la Corona, en algunos partidos, ahora en el primer Banco. Una coincidencia que apunta a nuevos tiempos.