EN BUENAS MANOS

Efectos nocivos del confinamiento en la piel

Como ocurre en otros muchos tipos de cáncer, el diagnóstico precoz es clave para un buen pronóstico de la lesión, pero el aislamiento y el miedo al virus han supuesto un obstáculo para acudir a consultas dermatológicas para muchas personas.

Redacción

Madrid | 15.06.2020 10:21 (Publicado 15.06.2020 10:17)

Efectos nocivos del confinamiento en la piel
Efectos nocivos del confinamiento en la piel | Redacción

El melanoma es uno de los tipos de cáncer de piel más frecuentes. Según la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), se estima que en 2020 se pronosticarán unos 1.000 casos más de melanoma que en 2019.

Como ocurre en otros muchos tipos de cáncer, el diagnóstico precoz es clave para un buen pronóstico de la lesión, pero el aislamiento y el miedo al virus han supuesto un obstáculo para acudir a consultas dermatológicas para muchas personas.

Una evidencia de ello son los resultados del estudio realizado por la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), en el que se detalla que los especialistas están observando ahora lesiones con un tamaño superior al que veían antes de la pandemia, lo que podría provocar un impacto negativo en la salud de los pacientes.

Pese a que la visibilidad es una de las grandes ventajas de los tumores cutáneos frente a otros tipos de cáncer, tal y como recoge Cigna, en muchas ocasiones pequeños cambios que se puedan producir en lunares o en una lesión en la piel pueden pasar desapercibidos a simple vista. Por esa razón, retrasar las visitas dermatológicas dificulta el diagnóstico precoz, lo que puede implicar que ciertas lesiones deriven en una mayor gravedad.

Con motivo del Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel, que se ha celebrado el 13 de junio, la aseguradora de salud Cigna ha analizado las cinco consecuencias del confinamiento en la piel que hacen indispensable la visita al dermatólogo:

•La cancelación o retraso de las consultas dermatológicas estos meses dificulta la detección precoz de lesiones malignas.

•El escudo natural de la piel se ha debilitado tras semanas en casa.

•La sobreexposición a la luz azul de las pantallas ha incrementado la pigmentación cutánea.

•Las quemaduras producidas por tomar el sol en la terraza pueden producir daños irreversibles.

•La intensidad de la radiación ultravioleta solar en la calle corresponde a índices muy altos.

La desescalada gradual exige nuevas rutinas para una exposición responsable que no ponga en peligro la salud de la piel.

Tomar las medidas de foto-protección adecuadas, limitar la exposición solar al tiempo recomendado y acudir a revisiones periódicas con especialistas son las tres medidas básicas a tener en cuenta.