Hay alimentos que son considerados 'superalimentos'.Esto se debe a que suelen ser altamente beneficiosos para la salud, ya sea por contener compuestos bioactivos, minerales, vitaminas, u otras propiedades nutricionales que pueden ayudar a prevenir distintas enfermedades.
A pesar de que existen numerosos 'superalimentos', hay un pseudocereal todavía desconocido que sería conveniente incluir en tu dieta. A continuación, descubre todos los componentes del amaranto, así como la positiva influencia que tiene este producto en nuestro organismo.
El origen del amaranto
Gracias a los aztecas, los incas y los mayas, hoy podemos beneficiarnos de las propiedades del amaranto, una semilla ancestral que estas civilizaciones empezaron a cultivar hace unos 7.000 años, y que, actualmente, es considerado el mejor alimento de procedencia vegetal para el consumo humano, según la Organización de las Naciones Unidas de la Alimentación y la Agricultura (FAO).
Propiedades y beneficios
Estas son las características que hacen del amaranto cuente con un gran valor nutricional:
- Contiene 8 aminoácidos esenciales: entre estos compuestos orgánicos se encuentra el triptófano, una molécula que participa activamente en la producción de la hormona de la felicidad (serotonina). Por ello, el amaranto es recomendable para las personas que padecen ansiedad, ataques de pánico o depresión. Además, este superalimento también es óptimo para pacientes con otras enfermedades como el asperger, el autismo o la esquizofrenia.
- Es antioxidante: el amaranto hace que las células estén protegidas y se mantengan vitales, previniendo así enfermedades cardiovasculares.
- Es una fuente de fibra: las semillas del amaranto aportan un 6,7% de este nutriente que ayuda a que el intestino funcione correctamente, combatiendo así los problemas de estreñimiento. Asimismo, la fibra favorece la eliminación del colesterol.
- Es rico en calcio y magnesio: de esta manera, los huesos y los músculos se mantengan fuertes y sanos.
- Incluye muchas vitaminas: entre ellas, la A, B, C, B1, B2, B3, D y K, que estimulan el funcionamiento del sistema inmunitario.
- Posee un alto contenido en hierro y proteínas: el primer mineral hace que el amaranto sea especialmente útil para las mujeres durante el período de menstruación, puesto que colabora en hacer frente a la anemia que genera la pérdida de sangre. Por otro lado, este superalimento presenta un 13,7% de proteína vegetal, siendo aconsejable para los deportistas, quienes incrementan el rendimiento físico y mental tras su consumo.
- Presenta escualeno: según la web de 'Mi herbolario', este compuesto orgánico natural "potencia el suministro de oxígeno a las células previniendo múltiples enfermedades derivadas de la degeneración o mutación celular". También proporciona poder anticancerígeno.
Cabe destacar que el amaranto no contiene gluten y presenta un índice glucémico bajo, por lo que es apto tanto para celíacos como para diabéticos. No obstante, si se consume en exceso, puede provocar diarrea o estreñimiento, dolor abdominal o gases
Cómo introducir el amaranto en la dieta
El amaranto puede consumirse de muchas maneras. Su grano puede ser añadido en ensaladas, mientras que su harina es utilizable para hacer múltiples recetas que requieran de alimentos empanados o que contengan bechamel, así como para elaborar cremas o salsas. Finalmente, para hacer uso de sus semillas, solo hay que cocerlas previamente durante, aproximadamente, 20 minutos.
