Las investigaciones de la llamada 'Operación señorito' se iniciaron a raíz de la denuncia presentada en Chiclana por una madre de un menor de 13 años que relataba cómo su hijo había sido víctima, hasta en cuatro ocasiones, de abusos sexuales por parte de un varón de 25 años, que había entrado en contacto con su hijo utilizando las redes sociales.
Tras ganarse la confianza del menor, el adulto lo había coaccionado para que le enviara fotografías desnudo.
La Guardia Civil ha descubierto que el detenido era el autor también de otros episodios de abusos a menores en la provincia de Cádiz.