Bernardo Montoya ha sido declarado culpable, por unanimidad del jurado popular los delitos de detención ilegal, agresión sexual y asesinato de la joven zamorana de 26 años Laura Luelmo. Los hechos sucedieron en diciembre de 2018 en El Campillo, Huelva.
La lectura del veredicto del jurado ha tenido lugar sobre las 18.00 horas de este viernes, 19 de noviembre. El jurado, compuesto por cinco hombres y cuatro mujeres han tenido que contestar y motivar un total de 19 preguntas.
Por su parte, tanto la Fiscalía como las acusaciones que ejercen la familia y la Junta de Andalucía han decidido mantener sus peticiones de pena realizadas en el jueves pasado, tal y como han confirmado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).
¿Cuánta pena se pide para Bernardo Montoya?
Las tres partes piden exactamente las mismas penas para Bernardo Montoya por asesinar a Laura Luelmo. En total, serían 20 años de prisión por un delito de detención ilegal, 12 por el de agresión sexual y prisión permanente revisable por el de asesinato.
Por otro lado, después de conocer el veredicto del jurado popular, el magistrado-presidente del juicio, Florentino G. Ruiz Yamuza, tendrá que dictar sentencia de acuerdo con lo manifestado por las partes y en el sentido en que se ha pronunciado el jurado.
¿Quién es Bernardo Montoya?
Según explicaron Manu Marlasca y Luis Rendueles en 'Territorio Negro', Bernardo Montoya era un "hombre conflictivo, más que fichado por la justicia por sus recurrentes robos y amenazas a mujeres, apuñalamientos y peleas y hasta por el asesinato de una anciana, por el que pasó más de 20 años en prisión".
Montoya, adicto a la heroína y a la cocaína, contaba con varios permisos de salidas de la cárcel por buena conducta, aunque en dos ocasiones las aprovechó para reincidir (2008 y 2015) asaltando y robando a varias mujeres. Aún así, el hombre quedó libre en octubre de 2018, dos meses antes de asesinar a la joven Laura Luelmo.
Así fue el asesinato de Laura Luelmo
Montoya residía en El Campillo, Huelva, cuando Laura Luelmo llegó para trabajar como profesora en un colegio y se convirtió en su siguiente víctima. Laura no conocía a mucha gente en la localidad onubense, solamente a algunos vecinos de la casa en la que vivía alquilada.
La víctima le llegó a comentar a su novio que había un vecino de etnia gitana (Bernardo Montoya) que "la observaba mucho" y que se sentía intimidada cuando lo veía.
La mañana del miércoles 12 de diciembre, según se pudo comprobar por las cámaras de seguridad de la zona, Laura salió de su casa a hacer la compra a un supermercado cercano, operación que Montoya vio y aprovechó su vuelta a casa para secuestrarla.
Tras esto, Montoya ató y golpeó a Laura Luelmo y posteriormente la agredió sexualmente. Aunque él alega que no llegó a violarla porque es impotente, de hecho, posteriormente hallaron restos biológicos en la vagina y en los pechos, pero no de semen.
Finalmente, el cuerpo de Laura apareció con un chaquetón y desnudo de cintura para abajo. Además, según comentaron los investigadores y el mismo asesino, el cuerpo fue trasladado en un coche hasta un camino rural que se encontraba a cuatro kilómetros del pueblo, donde al darse cuenta de que aún estaba aún viva y la ahogó con una manta.
Durante estos tres años después del asesinato, Montoya ha ofrecido dos versiones diferentes de lo que pasó aquel día. En un primer lugar dijo que acercó a Laura a su casa para ayudarle a mover los muebles y después reconoció que la atacó y secuestró directamente.
