El magnate y pederasta Jeffrey Epstein comenzó a amasar su fortuna tras cobrar una generosa recompensa de la familia de la actriz Ana Obregón y otras familias españolas, quienes le contrataron para recuperar sus inversiones en una firma de corretaje en quiebra, según The New York Times (NYT). En un reportaje publicado este martes, el citado medio expone que, a principios de la década de 1980, Epstein salía de manera casual con la famosa española, algo que ella niega rotundamente: "Estoy flipando con todo esto".
Así se ha pronunciado en el programa Y ahora Sonsoles de Antena 3: "Estoy flipando con todo esto, porque no es plato de buen gusto. Me pone nerviosa unir mi nombre a un depravado así", ha señalado. Afirma que en su etapa en Nueva York le presentaron a Epstein y reconoce que le pareció muy guapo. "Me dijeron que era muy inteligente (...) Empezamos una amistad", admite. Reconoce que antes de volver a España hubo "un pequeño avance" en su relación, "pero de forma muy educada". Cuenta que frenó a Epstein y le dijo: "Jeffrey, no me preguntes por qué, pero contigo no va a haber nada". De esta manera, la actriz insiste que entre ellos solo hubo amistad.

El origen de su fortuna
En contraposición con lo defendido por Obregón, el reportaje apunta a que en un momento dado, su familia, junto a otras familias de España, le pidieron ayuda para encontrar el dinero que habían invertido en la firma de inversiones Drysdale Securities, que acabó quebrando. Epstein contactó entonces con Bob Gold, un amigo y exfiscal federal, quien relató al periódico que, tras una búsqueda de un año, descubrieron que los fondos se encontraban en la sucursal de las Islas Caimán de un banco canadiense.
"Epstein recibió una generosa recompensa por haber encontrado el dinero", y esta ganancia, combinada con una presunta estafa al empresario Michael Stroll, "lo convirtió en millonario", de acuerdo con el medio neoyorquino. En su caso, Stroll acusó a Epstein de fugarse con gran parte de su inversión de 450.000 dólares en un acuerdo que nunca se materializó, mientras que Douglas Leese, contratista de defensa británico, también le acusó de malversar fondos a través de su cuenta de gastos.
Engaños y falsas conexiones
El NYT relata además otra serie de engaños que llevaron a Epstein, fallecido en 2019 en una cárcel de Nueva York en la que aguardaba el comienzo de su juicio por tráfico sexual, a convertirse en multimillonario. Por ejemplo, apunta que el magnate solicitó dinero a inversores externos, entre los que se encontraba el director ejecutivo de la editorial Simon & Schuster, para luego desaparecer con él.
Epstein también "exageró" sus lazos con David Rockefeller, patriarca de la prestigiosa familia Rockefeller, para "impresionar a personas e instituciones poderosas". Asimismo, impulsó su riqueza gracias al apoyo de Les Wexner, fundador del minorista L Brands, que posee marcas como Victoria's Secret, quien le ayudó a relacionarse con otras figuras influyentes como el gestor de fondos de cobertura Ken Lipper.
Su etapa en Bear Stearns
El citado medio asegura que un miembro de la firma de inversiones Bear Stearns, para la que Epstein trabajó entre 1976 y 1981, le presentaba "constantemente" clientes y mujeres jóvenes a las que enviaba a su apartamento y con las que, en muchas ocasiones, mantenía encuentros casuales o románticos.
Epstein también afirmaba falsamente que se había graduado en la universidad y, además, "abusó de su cuenta de gastos y otorgó a su novia acceso privilegiado a inversiones" en esa firma, agrega el NYT.

