Durante la última semana hemos asistido a un escenario de reproches, acusaciones y filtraciones entre PSOE y Unidas Podemos con las negociaciones para formar un gobierno de coalición como telón de fondo.
Unas reuniones que han sido retransmitidas prácticamente en directo por los medios de comunicación a raíz de las filtraciones de ambos partidos con los contenidos de las propuestas que hacían las formaciones y las repuestas que obtenían de la otra parte.
El PSOE dio por rotas las conversaciones el miércoles por la noche al rechazar Podemos su última oferta de una vicepresidencia social y tres ministerios -Sanidad, Igualdad y Vivienda-. Mientras, la formación de Pablo Iglesias contraofertó el jueves, a horas de la votación, con una nueva propuesta en la que pedía el Ministerio de Trabajo y era rechazada por el PSOE.
La situación dio lugar a un duro cruce de acusaciones en pleno debate de investidura entre Pedro Sánchez y el líder de la formación morada, mientras los portavoces de otros grupos parlamentarios, como Gabriel Rufián y Aitor Esteban, intentaban que se materializara un acuerdo entre las dos formaciones.
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