Artur Mas vence, pero lejos de la mayoría absoluta. Después de la campaña más duraque se recuerda y en unos comicios definidos como los más importantes de la historia de Cataluña, CiU revalida su poder al frente de la Generalitat pero lo hace con una amarga victoria y lejos de la mayoría absoluta que pedía su líder.
Las expectativas después del órdago soberanista de Mas eran muy altas y la mayoría absoluta era el aval que el líder nacionalista había solicitado al pueblo catalán para llevar a cabo la consulta sobre la independencia. Pero el escenario ha cambiado en el Parlamento catalán, donde ERC renace de las cenizas al duplicar su resultado de 2010. Beneficiado por el clima soberanista, se consolida como una de las principales fuerzas políticas.
A pesar de no lograr el respaldo esperado, Mas ya se había cubierto las espaldas: llevará a cabo la consulta con o sin mayoría. En unos comicios que han destacado por laalta participación, no ha vencido el proyecto de Mas, pero sí el soberanismo, al aglutinar más de la mitad del Parlamento catalán.
Rajoy insistió en que "nadie sacará a Cataluña ni de España ni de Europa", pero la tensión aumenta desde hoy en las relaciones de la Generalitat con el gobierno central, después de los desacuerdos en torno al pacto fiscal que desembocaron en el adelanto electoral.
El PSC aguanta como segunda fuerza
El partido liderado por Pere Navarro quiso coger un camino intermedio y difuso en el debate sobre la independencia que no le auguró buenos datos, pero finalmente logra aguantar como segunda fuerza. Este dato afecta directamente al líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, después de que algunos miembros de su partido le hayan cuestionado. Balón de oxígeno también para Pere Navarro, un líder al que apenas le había dado tiempo a consolidarse.
El escenario es distinto en el PP, que gana un diputado y se mantiene en resultados similares a 2010. ICV-EUiA logra 13 escaños, sumando tres más, y C's triplica su presencia en el arco parlamentario con 9 escaños.
La fuerza independentista CUP consigue 3 escaños, mientras que SI quedaría fuera del arco parlamentario, teniendo en cuenta que en los anteriores comicios de hace dos años logró cuatro diputados.
La hoja de ruta de Mas
CiU prevé reintroducir en el Parlament (con el apoyo de ERC, Solitaritat e ICV) la ley de consultas que quedó a medio trámite en la anterior legislatura por el adelanto electoral. Por eso, ha asegurado en numerosas ocasiones quela consulta se hará "sí o sí". Si el Gobierno la paraliza, Mas insiste en que acudirá a los tribunales internacionales.
Pero además del proyecto soberanista, la Generalitat debe hacer frente a los números rojos que inundan las cuentas catalanas. Con una caída de los ingresos, una economía en recesión, una tasa de paro del 22,5% y una deuda con crecientes costes financieros, el nuevo gobierno de CiU debería aprobar unos presupuestos sin el apoyo que el PP le prestó en los últimos dos años. No se descartan, por tanto, nuevos recortes.
Y, en otro frente, estaría la batalla legal. La filtración de un supuesto borrador policial que acusa a Mas y a Pujol de poseer cuentas en paraísos fiscales ha centrado el 'sprint final' de la campaña, y los líderes de CiU deberán defenderse de las acusaciones. Artur Mas ha asegurado que "dimitirá" si se demuestran los hechos.
