En el municipio de Blanca, el colegio público Antonio Molina González "se cae a pedazos". La situación se ha hecho ya insoportable que las familias han dicho basta ya y han iniciado una recogida de firmas en la plataforma Change.org. Ya llevan recogidas más de 1000 firmas.
Denuncian los padres y madres de alumnos que "de nada han servido hasta ahora las concentraciones, escritos y reuniones para conseguir un colegio digno y seguro".
Los niños acuden cada día a recibir su educación infantil y primaria a un colegio que fue inaugurado en el año 1949 "donde se ha invertido muy poco en reformar, renovar o mantener sus instalaciones".
Este colegio, además del deterioro sufrido por los años y el lamentable estado de su infraestructura, presenta muchas deficiencias que son alarmantes porque atentan contra la SEGURIDAD de los niños.
Según denuncian los padres y madres de alumnos "hay grietas en las paredes, goteras en aulas y pasillos cuando llueve, el centro carece de salidas emergencia o vías de evacuación alternativas. También hay humedades y signos de eflorescencias que dan lugar a unas condiciones de salubridad y habitabilidad deficientes. La instalación eléctrica es antigua y desfasada con cuadros eléctricos en ubicaciones peligrosas".
Además, la falta de espacios para docencia se suple impartiendo las clases en los pasillos. Algunas de las ventanas apenas se pueden abrir impidiendo la ventilación. Además, todas disponen de rejas de modo que no pueden usarse como salida en caso de una emergencia.
