Enla segunda semifinal del China Open 500, Sinner derrotó a Alcaraz con un marcador de 7-6(4) y 6-1, en un enfrentamiento que duró 1 hora y 55 minutos, desvaneciendo la posibilidad de que el de El Palmar estuviera de nuevo en una final.
Alcaraz y Sinner habían acumulado tres victorias cada uno en sus enfrentamientos previos, creando una situación de empate que Sinner finalmente rompió. El tenista italiano expresó su admiración por Alcaraz, quien ya ostenta dos títulos de Grand Slam, mientras que él aspira a conseguirlos en el futuro.
Carlos Alcaraz, como primer cabeza de serie, volvió a ganar el sorteo y eligió restar, una estrategia que había utilizado con éxito en sus partidos anteriores. Desde el principio, Alcaraz mostró su determinación al lograr un quiebre en el primer juego, llevándolo a una ventaja de 2-0 en el marcador. Sin embargo, Jannik Sinner no se dio por vencido y logró igualar el marcador a dos juegos.
Jannik Sinner demostró ser uno de los pocos jugadores capaces de enfrentarse de igual a igual a los potentes golpes de derecha de Carlos Alcaraz. Además, se notaba el vendaje en el muslo izquierdo de Alcaraz, que llevaba desde los octavos de final del Abierto de los Estados Unidos.
Sinner necesitó 39 minutos para tomar la delantera con un marcador de 4-3. Alcaraz emocionó a los fanáticos chinos al salvar puntos difíciles desde prácticamente la línea de fondo.
Dada la intensa igualdad del partido, el desenlace era previsible que se decidiera en un emocionante desempate. Alcaraz realizó un esfuerzo sobresaliente al recuperarse de un marcador de 5-2 y tener dos saques a favor para llegar a 5-4. Sin embargo, los dos puntos siguientes fueron para Sinner, quien se adjudicó el primer set.
En la segunda parte del partido, Sinner continuó aprovechando su primer servicio para mantener su ventaja y ganó el set con un marcador de 6-1. A pesar de los intentos de Alcaraz, Sinner demostró ser un adversario formidable, especialmente con su derecha plana que complicaba las estrategias de Alcaraz.
