Los socialistas han vuelto a aplazar, por segunda vez, la ejecutiva de hoy en la que iban a fijar el calendario para celebrar su congreso extraordinario. Un congreso del que saldrá el sucesor o sucesora, al frente de la secretaría general, del ex president de la Generalitat, Ximo Puig.
Justifican el retraso por motivos de agenda y esto lleva a interpretar problemas internos en el partido. De momento, suenan tres nombres como candidatos: la ministra Diana Morant, y los secretarios provinciales de Alicante y Valencia, Alejandro Soler, y Carlos Fernández Bielsa.
Al secretario general del PSPV, y ex president, Ximo Puig, se le ha preguntado hoy por la posible candidatura de Alejandro Soler y por el aplazamiento. Dice que hay tiempo suficiente para convocar el Congreso Extraordinario en este primer trimestre. Pide Puig, en cualquier caso, que se piense en el partido.
"Tenemos tiempo suficiente", ha asegurado Puig, y ha señalado que "se trata de madurar al máximo la mejor solución" pues el objetivo es que haya "una alternativa seria, potente y rigurosa al gobierno más reaccionario de la historia del autogobierno", en alusión al actual formado por PP y Vox.
Preguntado por si hay algún problema, ha dicho que "no es exactamente un problema, es buscar una salida" después de la decisión que tomó de dejar el cargo, una medida que, según ha dicho, "tiene que ver con mejorar la competitividad del proyecto político, sobre todo en función del interés general de los valencianos".
Sobre la posible candidatura del secretario general del PSPV-PSOE en la provincia de Alicante, Alejandro Soler, ha afirmado que "cada uno es dueño de su capacidad de acción" y ha añadido: "Todos tenemos que pensar en el interés general del partido y de la Comunitat Valenciana".
Ha asegurado que el congreso extraordinario que debe elegir un nuevo secretario general se celebrará en el primer trimestre del año si no hay circunstancias excepcionales, y no descarta que pueda hacerse a finales de febrero pues cree que "hay tiempo suficiente".
Cree que de esta forma hay tiempo "de poder proyectar, en tres años, un liderazgo" y reformular el proyecto con la base de lo conseguido desde que él fue elegido secretario general, en el que el partido ha pasado de tener el 15 % de los votos a reunir el 30 %.